Los Lakers de LeBron y Anthony Davis liquidan a los Warriors

La serie más mediática de los playoffs de la NBA acabó con los Lakers en la final del Oeste, donde se medirán a los Nuggets, y los Warriors eliminados (122-101 y 4-2). La temporada de los Lakers está empezando a entrar en los libros de historia. El 2/10 con el que arrancaron el curso suena muy lejano. Los movimientos a mitad de temporada impulsados por el criticado mánager general Rob Pelinka y el buen estado físico de LeBron James y Anthony Davis han convertido a los Lakers en un equipo muy respetable. Invictos en casa, han sido los primeros en ocho años en superar en una eliminatoria del Oeste a los Warriors.

El sexto partido fue el perfecto ejemplo de lo que son a estas alturas los Lakers. Cinco jugadores anotando más de 10 puntos, LeBron asombrando una vez más con 30 puntos, 9 rebotes y 9 asistencias, el Davis más sólido (17 puntos y 20 rebotes) y una defensa que dejó a los Warriors en 101 puntos. El equipo de la Bahía, que por primera vez en 28 eliminatorias, no ganó un partido como visitante, vivió otra noche nefasta en el tiro (13/48 en triples) y Curry estuvo demasiado solo. El base anotó 32 puntos, pero estuvo por debajo del 40 por ciento de acierto. Después de cuatro títulos en ocho años, Curry apuntó que los Warriors están preparados para regresar: "Por muy terribles que sean las sensaciones ahora, sentimos que podemos regresar". Steve Kerr, su técnico, lo ratificó: "Nos queda mucha gasolina en el tanque".

Los Lakers están a una eliminatoria de pelear por el que sería su décimo octavo anillo con lo que superarían los 17 de los Celtics. En el equipo de Darwin Ham todos suman. A las dos estrellas se han sumado un bloque de secundarios que tienen más que asumido su rol en el equipo. D'Angelo Russell, Rui Hachimura, Jarred Vanderbilt, Austin Reaves, el último cuarto en el cuarto partido de Lonnie Walker IV...

El crecimiento del equipo en los últimos tres meses ha sido extraordinario. El balance desde mediados de febrero es de 18/8, la defensa es de las mejores de la Liga y pasaron de estar desahuciados a la séptima plaza en el Oeste lo que les permitió la disputa del play-in. Liquidaron a los Grizzlies y ahora lo han hecho con los Warriors. Anthony Davis (21,2 puntos, 14,1 rebotes y 3,3 tapones de media con un 53 por ciento de acierto en el tiro) es la clave del equipo y ahora se va a emparejar con el jugador más en forma del mundo, el serbio Nikola Jokic. Lo de LeBron es de otro planeta. Con 38 años y después de 20 en la Liga promedia 23,4 puntos, 10 rebotes y 5,3 asistencias en busca de su quinto anillo.

El último llegó en la burbuja de 2020. Antes del título en el año de la pandemia, los de californianos no alcanzaban la final de la NBA desde 2010, cuando Kobe Bryant y Pau Gasol ganaron el decimosexto anillo laker ante los Celtics.

Miami Heat disputará su tercera final de la Conferencia Este en cuatro años después de deshacerse de los Knicks en el sexto partido (96-92, 4-2 en la serie). Los Heat superaron de forma agónica el play-in, se cargaron a los grandes favoritos, los Bucks, se han deshecho de los Knicks con autoridad y ahora esperan el rival que salga del séptimo partido entre Celtics y Sixers.

La omnipresencia de Jimmy Butler en pista (24 puntos y 8 rebotes) y la dirección de Erik Spoelstra han convertido a los Heat en el primer equipo en 24 años que alcanza la final del Este partiendo desde el octavo puesto.