Mascherano y Touré Yaya: El cruce de caminos del «4»

Las carreras deportivas de Mascherano y Yaya Touré han estado marcadas en cierto sentido por Busquets. El joven «Busi», para el que Touré siempre tiene buenas palabras, creció con Guardiola y fue quitando minutos al marfileño, que en 2010 decidió abandonar el equipo azulgrana para firmar por el Manchester City. «Mi mujer me dijo que no podía estar sin jugar a los 27 años», reconoció el centrocampista un tiempo después en el diario «Sport». Para ocupar su puesto, el Barcelona apostó por Mascherano ese mismo verano, por lo que ambos jugadores no llegaron a coincidir en la Premier. El capitán de Argentina y mediocentro del Liverpool llegó a la Ciudad Condal con galones, pero también con humildad. Nunca fue fácil jugar en el conjunto azulgrana. Yaya Touré pidió paciencia con «Masche» y el argentino ha llegado a asegurar que estar en el Barça era como volver a aprender a jugar al fútbol. Pero Busquets, ya todo un campeón del mundo, era más intocable todavía en un puesto que mamó en las categorías inferiores del club, una posición que entiende como pocos, por lo que Mascherano retrasó su sitio muchos metros para convertirse en un central solvente. El pasado verano parecía casi fuera del club catalán, pero Luis Enrique pidió que se quedara y es uno de los futbolistas en los que más confía, además de ser uno de los referentes también fuera del campo. Aparte de central, esta temporada el técnico le ha utilizado también en su posición de toda la vida, en el medio, que hoy volverá a ocupar por la baja de Busquets por lesión. No estará en el Camp Nou el «4» por excelencia, pero sí los dos jugadores que han compartido o comparten puesto con él, uno enfrente del otro. «De cerca se ve la profesionalidad y el trabajo de Mascherano. Es un jugador difícilmente comparable, siempre da un rendimiento muy alto», lo alabó ayer Luis Enrique. El argentino es el tercer futbolista más utilizado por el entrenador en la Liga de Campeones (540 minutos), sólo por detrás de Messi (607) y Ter Stegen (630).

Por su parte, Touré vuelve al Camp Nou por segunda vez. En los octavos del año pasado participó en la derrota de su equipo por 2-1. Siempre ha admitido sentir una gran admiración por el club, e incluso aprendió catalán durante sus años como azulgrana, en los que fue protagonista de la histórica temporada en la que conquistaron seis títulos. «Siempre es especial jugar en el Camp Nou y en el club que te vio crecer», admitió ayer el africano. La ida de hace tres semanas se la perdió por sanción, pero hoy intentará ayudar a sus compañeros a remontar. «Siempre digo que podemos jugar sin Yaya, y hemos demostrado que podemos ganar sin él, pero prefiero tenerle, es importante para nuestro equipo», aseguró Pellegrini. «Es uno de sus pilares», opinó Luis Enrique. Desde la grada, Busquets estará viéndoles a los dos.