«Pole» de líder

Cuando Rossi contesta a las preguntas de la Prensa en la conferencia oficial tras la Q2, Lorenzo mira de reojo y se recoloca la gorra que lleva en la cabeza. Cuando el que responde es Jorge, Valentino también se revuelve en su asiento y escucha atento. Los dos están luchando por el título Mundial, con el permiso de Marc, y el italiano ya siente muy cerca el acoso de su compañero de equipo. Son nueve puntos tras salir de Indianápolis, que pueden quedar en nada y con el español por delante por número de victorias si en Brno convierte su dominio en victoria y Márquez se cuela entre las dos motos azules.

El número 99 está fuerte y se siente confiado. Ayer destrozó tres veces el récord de la pista checa, la última para quedarse con el primer puesto de la parrilla: «Estoy muy orgulloso de la vuelta, que no ha sido perfecta del todo, porque en la última curva me he equivocado un poquito», admitía. Marc se quedó muy cerca y tiene ganas de aumentar a tres su racha de triunfos. «He visto que estoy ahí, con ellos en cuanto a ritmo, así que habrá que arriesgar», avisaba. Es el que tiene menos, así que la guerra psicológica se la deja a las dos Yamaha. «No entro en ella, estoy un poco lejos», dice, aunque su actuación puede decidir quién sale líder de Brno.

Los tres mejores poblaron la primera línea de parrilla gracias a la mejoría de Rossi, que sólo ha estado tan adelante una vez más en lo que va de curso. «Es importante verlos desde aquí y no desde tan atrás como otras veces. Sabía que tenía que mejorar en la clasificación si quería poder disputar el Mundial», confesaba Valentino, que considera clave la salida y las primeras vueltas de hoy: «Si Jorge sale bien y se escapa no habrá mucha emoción, pero si consigo estar con él al principio sí la habrá», confesaba el italiano.

Ha estado un pasito por detrás durante todo el fin de semana, pero los ritmos de los tres «magníficos» en el libre número 4 muestra la igualdad suficiente como para que se pueda ver una carrera a tres bandas. Lorenzo está un pasito por delante, ya que pudo rodar con más frecuencia en 1:56 «bajo», así que tiene a tiro el liderato si gana. Necesita para ello que Márquez acabe detrás de él y Rossi complete el podio como mejor resultado. Su desarrollo del fin de semana ha sido parecido al de Jerez, donde empezó lo que luego sería su póker de triunfos, dominando desde el semáforo hasta la bandera de cuadros.

«Me siento bien, veremos qué pasa y al final te diré si la carrera ha sido excitante», confiesa sin querer ponerse demasiada presión. Rossi trata de que tenga toda y le señala como el «hombre a batir» hoy a partir de las 14:00 horas. Pedrosa, con su dolor en el tobillo tras la caída del viernes no parece invitado a esta fiesta.

Es una cita para tres, que se vigilan atentamente. Ayer Márquez confesó haber seguido a Valentino en la Q2: «Quería saber dónde son fuertes la Yamaha y él concretamente. Pude ver que no estoy lejos. Aproveché que ya había terminado mi mejor vuelta». Rossi se dio cuenta. «Sabía que en cuanto le pasara me iba a seguir. Es normal, es su trabajo».