Motociclismo

Pedro Acosta, campeón del mundo de Moto2: dos títulos en tres años para el "tiburón"

El murciano aprovecha en Malasia su segunda bola de Mundial y se corona a dos carreras de final como el rey de la categoría intermedia. Llegará MotoGP como campeón de todo en sólo tres temporadas

Spanish rider Pedro Acosta celebrates as he secured his 2023 Moto2 World Championship title after the Moto2 class race of the MotoGP Malaysian Grand Prix at the Sepang, Malaysia Sunday, Nov. 12, 2023. (AP Photo/Vincent Thian)
Pedro Acosta, en el podio de Sepang ya como campeón del mundoASSOCIATED PRESSAgencia AP

Pedro Acosta es un piloto distinto, de esos especiales a los que los rivales y los aficionados miran de una manera diferente a los demás. Tiene talento y carisma para ser una estrella en MotoGP y en ello está. A la categoría reina llegará en 2024 con una Gas Gas de KTM y lo va a hacer como campeón de todo, porque en tres temporadas en la élite ha ganado dos títulos: en 2021, el curso de su estreno, fue el rey de Moto3 como "rookie", y en este 2023 ha arrasado en Moto2 para llevarse también esta corona al segundo intento. Son 14 podios sobre 18 carreras los que ha firmado y le han sobrado las dos que quedan: Qatar y Valencia. En su segunda bola de partido no falló este murciano de 19 años, hijo de una familia de pescadores del Puerto de Mazarrón.

Necesita estar entre los cuatro primeros para ser matemáticamente campeón aunque ganara Tony Arbolino y resulta que fue segundo por detrás de Fermín Aldeguer mientras el italiano, su único rival, entró décimo y no tenía más remedio que rendirse a Acosta. En 2021 se convirtió en el piloto más joven en ganar un título de Moto3 y ahora es el más precoz en conseguirlo en la categoría intermedia sólo por detrás de Dani Pedrosa.

Lo suyo son los récords y por eso todos los rivales que le esperan en MotoGP saben que en 2024 llega un piloto especial, de esos tocados por una varita y destinado a ponerle a la categoría reina muchas de las cosas que ahora le faltan. Es un elegido, que celebró el éxito en la misma pista de Sepang con sus padres y su hermana, que le quisieron acompañar en un día histórico.

En realidad su padre, Pedro Acosta también, lo acompaña siempre a las carreras, y su madre le hacía de chófer hasta que tuvo edad para sacarse el carné de conducir. Fue campeón de la Red Bull Rookies Cup en 2020 y al año siguiente, cuando nadie del gran público lo conocía, apareció en Moto3 para dominarlo desde su condición de novato. Cuando la mayoría busca en ese curso de debut ser el "rookie" del año, él fue a por el título y no falló. En su primera carrera en Qatar fue segundo y ahí empezó todo.

Una racha brutal nada más llegar, con dos títulos en tres años, sólo con el "descanso" de su primer año de Moto2, donde muchos esperaban que arrasara como en Moto3, pero le costó más. No conseguía terminar las carreras y puntuar en una categoría que siempre es complicada para los nuevos. Con todo y con eso, si no se llega a romper el fémur haciendo motocross, quién sabe si podría haber reenganchado en el final de año para poder luchar por el título.

En 2023 todo ha sido diferente y su superioridad se ha notado desde el principio. Ha ganado siete de dieciocho carreras, empezando por la primera en Portugal y sus catorce podios han marcado la diferencia. Nadie ha podido hacerle sombra y la única duda durante el año era saber cómo iba a subir a MotoGP. Tenía garantizado por contrato ese ascenso en 2024 con KTM, la estructura que le ha acompañado estas tres temporadas en el equipo de Aki Ajo, uno de los mayores cazatalentos del campeonato. Donde pone el ojo aparece un campeón y nadie en la fábrica austriaca ha querido desprenderse de una estrella como el murciano. No había sitio en la parrilla de MotoGP en las cuatro motos que tienen y gestionaron una quinta que no ha sido concedida por Dorna. Así que finalmente tuvieron que bajar de la Gas Gas a Pol Espargaró para subir a Acosta, que será compañero de equipo de Augusto Fernández y ya probará esa moto a finales de este mes en los test de Cheste.

Del mar a los títulos

Su padre, su abuelo, su bisabuelo y su tatarabuelo son y han sido pescadores y precisamente del barco de su familia, llamado Peretujo, es de donde ha salido el presupuesto con el que Pedro iba cubriendo etapas en los distintos campeonatos. “Nuestro oficio es muy sacrificado y yo quería que mi hijo fuese algo más en la vida. Conmigo ya estaba bien y era el momento de que la siguiente generación dejara la pesca”, decía el padre del nuevo campeón de Moto2. Y eso ha hecho Pedro Acosta, que desde pequeño se dio cuenta que se le daba bien la moto y además le gustaba. El barco sólo lo visitaba para jugar con su hermana cuando era más pequeño y ahora su vida es entrenar cada día para ganarlo todo. De momento tiene dos títulos en tres años y en MotoGP va a dar guerra desde el principio.

"Cuando llegué al Mundial no sabía ni cómo funcionaba la pantalla de la moto. Sólo sabía que cuando se encendía la luz tenía que cambiar de marcha", aseguraba en DAZN nada más ser campeón de Moto2 con toda la humildad del mundo. De hecho se acordaba de sus fallos el año pasado, que le han servido para ser sólido en este 2023, y tenía un recuerdo para su mánager, Albert Valera, porque poco antes de llegar al Mundial de Moto3 se quedó sin equipo. Pero apareció el KTM Ajo y el resto es historia.