Pep Guardiola aprovecha el racismo para atacar a España

El racismo contra Vinicius va a tener consecuencias para los que le insultaron. El titular del Juzgado de Instrucción número 10 de Valencia ha incoado diligencias previas para investigar los insultos racistas dirigidos al jugador del Real Madrid el pasado domingo, durante el partido de la Liga Santander que enfrentó a este equipo con el Valencia CF en el estadio de Mestalla, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV). En el auto, que se notificó el viernes, la magistrada ha acordado citar en calidad de investigados a los tres espectadores que fueron detenidos esta misma semana por la Policía Nacional en relación a estos incidentes

La justicia empieza a actuar, porque el asunto es grave y en la sociedad española y mundial todo el mundo sigue hablando de los mismo porque las imágenes han dado la vuelta al mundo. Pep Guardiola también ha dejado su opinión, cuando le han preguntado en Manchester por lo sucedido. El entrenador español ha comparado LaLiga con la Premier. "Aquí son muy estrictos, saben lo que tienen que hacer", ha dicho. "Pero el racismo está en todos los lados, no en un solo sitio. Es un problema en todos lados. Nos han educado para pensar que somos mejores que nuestros vecinos, que somos mejores que el resto", ha continuado Guardiola.

El ex entrenador del Barcelona ha hecho un canto al multiculturalismo: "Pero nuestras generaciones vienen de todas partes del mundo. Nuestros ancestros vienen de inmigrantes, de guerras, de dictaduras. Gente que tuvo que salir de sus países, crear sus familias, quizás volver a su país de origen... El problema es que el racismo está en todas partes. Y no solo en el color o el sexo, también en las actitudes. Nos creemos que nuestro país es mejor que el resto, que nuestro idioma es el mejor. Cuanto más viajes, más te das cuenta que todos somos iguales, aceptas la diversidad. Aún estamos muy lejos de eso", subrayó. Guardiola añadió que espera que las cosas mejoren en España y entonces añadió su dardo, su ataque: "Conociendo un poco el país no soy optimista". Eso ha tenido la respuesta de Xavi Hernández, entrenador del Barcelona, y que suele coincidir con Guardiola en casi todo. Esta ver no. "Discrepo. Creo que es un tema educacional. Hay que educar a la gente. El insulto no es lo normal y hay que cambiar cosas", ha dicho con firmeza quien fuera el centrocampista principal del Barcelona de Guardiola.

En muchos medios de comunicación se está planteando que el racismo que ha sufrido Vinicius se está convirtiendo en un ataque a España, a la que se acusa de racismo y que eso tiene un fin: que no sea elegida para el Mundial de 2030. Si eso es así, las palabras de Guardiola no ayudan.

Puede que tampoco ayude los cambios en las sanciones, la sensación de que nunca se toma en serio: el Comité de Apelación de la Federación Española de Fútbol (RFEF) decidió, por ejemplo, este viernes estimar parcialmente el recurso del Valencia y redujo de cinco a tres partidos el cierre de la grada Kempes en el estadio de Mestalla, y rebajó la multa de 45.000 a 27.000 euros.

Apelación denegó ayer la petición del Valencia de suspender cautelarmente, de forma urgente o urgentísima, la sanción impuesta por el Comité de Competición, que el pasado martes 23 decidió la clausura parcial del recinto por los insultos racistas dirigidos por espectadores al madridista Vinícius Júnior, en el encuentro de Liga jugado el día 21.

El comité indicó que no podía conceder la cautelar, "por ser imposible valorarla sin la existencia de recurso", y accedió a la petición del club de trasladarle el "expediente" para que remitiera su reclamación, que ha sido estimada en parte.