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Los regalos navideños de los pilotos de la Formula 1: desde un bañador ‘picante’ hasta una gorra de capitán de barco

Este tradicional 'amigo invisible' entre compañeros de parrilla revela el buen ambiente que existe entre ellos

Fernando Alonso con una gorra de capitán de barco, Leclerc con una pala de padel y Carlos Sainz con un bañador con chiles en el 'Secret Santa' de la F1
Fernando Alonso con una gorra de capitán de barco, Leclerc con una pala de padel y Carlos Sainz con un bañador con chiles en el 'Secret Santa' de la F1Redes SocialesRedes Sociales

En uno de los momentos más esperados de las vacaciones de invierno, los pilotos de Fórmula 1 han mantenido viva la tradición del "Secret Santa", un juego que les une en un intercambio de regalos creativos y sorprendentes. Después de una temporada intensa que duró nueve meses, los pilotos de la F1 se tomaron un merecido descanso y participaron en este juego, agregando un toque festivo a sus vidas.

La iniciativa consiste en que cada piloto selecciona un regalo especial y personal para otro compañero de la parrilla, creando momentos divertidos y emotivos. Desde gorras de capitán hasta un bañador con dibujos de chiles, los regalos han demostrado ser tan diversos como los propios pilotos. Un vídeo en YouTube capturó los momentos en que los pilotos abrieron sus regalos, revelando desde una taza con un emoji hasta una pala de pádel Kimoa.

El juego del "Secret Santa" ha dejado anécdotas memorables, como la reacción de Fernando Alonso al recibir su regalo (una gorra de capitán de barco) o la sorpresa de Guanyu Zhou al descubrir que Charles Leclerc le había regalado un calendario benéfico de su compañero de equipo, Valtteri Bottas. Max Verstappen , por su parte, desató la risa al introducir fotos del trasero de Bottas como parte de su regalo. Estos momentos festivos proporcionaron a los pilotos la oportunidad de relajarse y compartir risas antes de sumergirse en las celebraciones de fin de año con sus seres queridos.

Los regalos, más allá de la diversión, revelaron la conexión única entre los pilotos, quienes, a pesar de la intensa competencia en la pista, demostraron amistad fuera de ella. Este evento navideño se ha convertido en una tradición querida que une a la comunidad de la Fórmula 1, recordándo a los fans que incluso en un deporte tan competitivo, el espíritu navideño puede florecer entre los pilotos mientras comparten risas y regalos únicos.