Nadal, Shapovalov y la bronca con el juez de silla: “Sois todos unos corruptos”

Rafa Nadal acababa de ganar el primer set a Shapovalov en su partido de cuartos de final del Open de Australia. Lo hizo con solvencia, con mucho porcentaje de primeros servicios y aprovechando un juego malo del canadiense, que prácticamente le regaló un break en blanco para el 6-3. El joven norteamericano empezaba sacando el segundo servicio y entonces estalló, como se puede ver en el vídeo.

Tuvo una dura conversación con Carlos Bernardes. Se quejaba de que el español estaba tardando mucho en ponerse para restar. Cuando el árbitro toca el botón, los jugadores tienen 25 segundos (se pone en marcha un contador) para colocarse, tanto para sacar como para restar, y el canadiense estaba esperando a que llegara su rival y entre los nervios por el mal primer set y del partido en sí, se quejó. Bernardes le decía que él tampoco estaba preparado, que estaba hablando con él, el tenista rubio le insistió y acabó con un: “Sois todos unos corruptos”.

No se le pasó rápido el enfado a Shapovalov, que en el siguiente juego continuó con lo mismo. Esa vez le tocaba servir a Nadal y el juez de silla dijo al canadiense que por qué le miraba, que al balear le quedaban ocho segundos para sacar, que estaba todo correcto, que qué problema había. Rafa terminó interviniendo y se fue a la red para charlar con su oponente. Fue una conversación más o menos amistosa y el incidente no llegó a más. “¿Cuál es el problema?”, le preguntaba el mallorquín. El partido continuó.

Curioso que el incidente sucediera con el brasileño Carlos Bernardes, el juez de silla con el que el manacorense se las ha tenido tiesas en más de una ocasión. “No tengo ningún problema contigo, pero no puedo más. Voy a pedir que no me arbitres más”, aseguró Rafa en un partido en Río de Janeiro en 2015 contra Fognini. “Eres el que más presión me mete de todo el circuito”, le insistió.

Más sonada todavía que esa fue una discusión unos años antes, en el Torneo de Maestros de 2010 contra Tomas Berdych después de un punto apurado del checo en el que el español levantó la mano al pensar que era fuera, pero la llegó a devolver y la metió dentro, la cantaron fuera, la bola había sido buena y Bernardes le dio el punto a Berdych. El cabreo de Nadal, que incluso parecía que por un momento se negaba a jugar (pocas veces se le ha visto así en una pista), tuvo su momento más alto cuando le dijo: “Me estás diciendo una barbaridad, Carlos”. El punto se lo dieron por perdido, pese a eso el checo dijo después que el árbitro le había tenido miedo a Nadal.