Invasión de Ucrania

De ganar a Rafa Nadal, a la guerra: “Estoy listo para dispararle a un invasor ruso”

“No voy a ser Rambo en una semana, pero ya me siento cómodo con las armas y puedo disparar a la cabeza desde 25 metros”

Alexander Dolgopolov, a su llegada a Kiev.
Alexander Dolgopolov, a su llegada a Kiev.Instagram Dolgopolov

El tenista ucraniano Alexander Dolgopolov llegó a ser el número 13 del mundo en 2012, ganó a Rafa Nadal en dos de las nueve ocasiones en las que se enfrentaron y venció en tres torneos del circuito ATP (Umag, 2011; Washington, 2012 y Buenos Aires, 2017). Disputó su último partido en el circuito en 2018 y ahora ha decidido cambiar la raqueta por las armas para defender a su país de la invasión de Rusia ordenada por el presidente de este país, Vladimir Putin.

Preguntado por el diario francés L’Equipe por las razones de volver a Ucrania para luchar, Dolgopolov respondió de forma rotunda: “Esta es mi casa Alguien tiene que defender nuestro hogar. No fue una decisión difícil. Vi como nuestro país estaba luchando, vi a nuestro gobierno resistiendo, nuestro presidente está aquí, muchos personajes famosos están aquí... ¡Tengo que estar allí! Llevé a mi familia a un lugar seguro y luego comencé a planificar mi regreso a casa. Después de unos días de conflicto, quería volver. Ya no podía ver lo que estaba pasando sin hacer nada. Pasé todos mis días viendo las noticias. Fue horrible. Creo que puedo ayudar, estando allí, siendo voluntario. Defenderé a mi país lo mejor que pueda”.

“Estoy listo para dispararle a un invasor ruso”, sentenció Dolgopolov. “Antes eran raquetas y cuerdas, ahora esto”, escribió en su cuenta de Twitter junto a una foto de su arma, munición, un chaleco antibalas y un casco.

El ucraniano publicó un extenso mensaje en Instagram explicando las decisiones que ha ido tomando desde que se inició el conflicto:

“Hola chicos, no necesito responder muchas preguntas, así que espero responderlas todas de una vez. ¡Esta guerra me pilló en Turquía! Llegué allí un día antes de que todo esto empezara y mi hermana y mi madre se vinieron conmigo. ¿Por qué? Porque después de mucha información de las mejoras agencias de inteligencia del mundo y el gran descrédito que había en casa, entendí que podía empezar una gran guerra con ataques sobre Kiev y todo el país, por lo que me pregunté qué ocurriría los primeros días y semanas.

Entendí que habría pánico masivo, incluido el mío, y lo mejor que podía hacer era que el mundo conociese la verdad en los primeros días de este infierno y enviase dinero a nuestro ejército y no solo emplear el tiempo en salvar a mi familia. En pocos días, mis queridos ucranianos y yo destrozamos la información mundial, y ningún país libre tenía dudas sobre la verdad y quién era el agresor.

En este tiempo he hacer prácticas de tiro y tuve la fortuna de que un antiguo soldado profesional me enseñó durante 5 ó 7 días. Ellos estaban muy felices de ayudarme una vez que conocieron mi objetivo, así que muchas gracias a nuestros amigos de Turquía. No voy a ser Rambo en una semana, pero ya me siento cómodo con las armas y puedo disparar a la cabeza tres de cada cinco veces, desde 25 metros.

A la vez que entrenaba, estaba preparando mi regreso, así que una vez que encontré a unos chicos de Estados Unidos que planeaban ir a Ucrania y estábamos preparados, empezamos nuestro viaje. Cogimos varios chalecos antibalas para nosotros y nuestro ejército, viajamos a Zagreb, cogimos todo lo que necesitábamos, además de gafas de visión térmica y otras cosas y condujimos a través de Europa para entrar en Ucrania desde Polonia y, por último, llegar a Kiev.

¡Esta es mi casa y nosotros la defenderemos con toda la gente que se ha quedado aquí! Muchas gracias y respeto a toda la gente famosa que nos apoya. Mucho respeto y también estoy orgulloso de cómo está unido este país ante la presión de un dictador loco. ¡La verdad está con nosotros y esta es nuestra tierra! Me quedaré en Kiev hasta la victoria y después. ¡Gloria a Ucrania!”.