Espectáculo

¿Hay mejor forma de hacer un break? Alcaraz lo logró ante Khachanov con un Willy, un globo de espaldas por debajo de las piernas (vídeo)

El joven murciano superó al ruso por 6-1, 6-4 y 6-4 y ya está en cuartos de final de Roland Garros

Carlos Alcaraz mostró un despliegue espectacular en octavos de Roland Garros ante Khachanov
Carlos Alcaraz mostró un despliegue espectacular en octavos de Roland Garros ante KhachanovMARTIN DIVISEKAgencia EFE

Carlos Alcaraz tiene algo que quizá lo distingue del resto: se nota que se lo pasa bien en la pista. Quizá la inconsciencia de la juventud. No sólo se le nota en la sonrisa, también en la forma de celebrar los puntos, en las cosas que busca hacer, en los golpes imposibles a por los que corre incluso parece que con placer. Ante Khachanov, en los octavos de Roland Garros, logró uno de los puntos no sólo del torneo, seguramente de lo que vamos de año tenístico.

Era el único momento se puede decir que complicado que estaba teniendo Alcaraz en su partido ante el ruso. Tras hacer un break, el español sufrió la contrarrotura que igualaba el tercer set. Pero su reacción fue fulminante y respondió con un nuevo break logrado de la mejor forma posible. Se vio obligado a hacer una volea forzada a la que llegó Khachanov y puso un globo perfecto. Entonces, Carlitos corrió para atrás pero estaba muy lejos de la pelota, la única solución era hacer un Gran Willy, lo intentó y le salió un globo perfecto que le permitió ir de nuevo con ventaja.

El golpe que dio el español, de espaldas a la red, por debajo de las piernas, se llama así porque la inventó Guillermo Vilas, leyenda argentina del tenis que ganó dos veces el Open de Australia, un Roland Garros y un US Open.

Alcaraz confesó después que es un golpe que normalmente no le sale, pero en una situación de máxima presión, lo clavó. Con su triunfo, se clasifica por segunda vez para los cuartos de final de un torneo de Grand Slam. Ya lo logró el año pasado en el US Open, donde puede decirse que se dio a conocer al público de todo el mundo con su triunfo ante Tsitsipas en tercera ronda, a la que siguió otro duelo ganando a cinco sets ante Gojowczyk, para tener que retirarse después ante Felix Auger-Aliassime.

Ahora, por supuesto, es un tenista diferente, más hecho tanto física como mentalmente. Ha llegado al torneo de París como uno de los favoritos, pero su forma de verlo es que quiere convertir toda esa presión en motivación. El año pasado también disputó Wimbledon, y pasó una ronda, y Roland Garros, donde superó la fase previa y dos rondas. En el Open de Australia su mejor actuación ha sido este curso: también accedió a tercera ronda y forzó a Berrettini a un super tie break en el quinto set.