A la final

Alcaraz y su rutina en el Mutua Madrid Open: así han sido los tres cumpleaños que ha cumplido en la Caja Mágica

Carlos Alcaraz llegó a los 20 años el día que superó a Coric en semifinales del Mutua Madrid Open. También jugó partidos el día de los 18 y los 19

Carlos Alcaraz, of Spain, center down, poses with a cake for his 20th birthday after his victory over Borna Coric, of Croatia, during men's semifinal at the Madrid Open tennis tournament in Madrid, Spain, Friday, May 5, 2023. (AP Photo/Manu Fernandez)
La felicitación de cumpleaños que recibió Alcaraz en la pista Manolo SantanaASSOCIATED PRESSAgencia AP

La Caja Mágica cantó el cumpleaños feliz a pleno pulmón en lo que ya se está convirtiendo en una tradición en el Mutua Madrid Open. Carlos Alcaraz lo recibió con una sonrisa, después de meterse en la final tras vencer a Coric (6-4 y 6-3). Busca repetir título, algo que en la capital sólo ha logrado Rafa Nadal (en 2013 y 2014) en las 20 ediciones precedentes del torneo.

Y precisamente contra Nadal empezó esa tradición: en 2021 Alcaraz llegaba a la mayoría de edad enfrentándose al zurdo y sufriendo una dura derrota (6-1 y 6-2) que seguro le enseñó mucho. "Sólo era un niño que salió asustado a la pista", confesó ayer. ¡Como si ahora no lo fuera!

Los 19 años los cumplió en 2022 jugando contra Cameron Norrie en la Manolo Santana y venciendo en tres sets, como previa a derrotar a Nadal, Djokovic y Zverev y levantar el título.

Y el día de los 20 rindió a Coric en un encuentro en el que también tuvo algo de protagonismo Nadal, porque mientras se estaba disputando el segundo set el balear anunció en sus redes sociales que tampoco va a estar en el Masters 1.000 de Roma, aunque va mejor en la recuperación de su lesión; y que, por tanto, irá directamente a París a intentar conquistar su décimo quinto Roland Garros y su vigésimo tercer Grand Slam sin rodaje en tierra.

Pero eso será una batalla futura. La presente es Madrid y es Alcaraz, que está disputando en esta edición multitud de partidos y todos los está sabiendo jugar bien. Si contra Ruusuvuori fue el de saber sufrir, el del "mono de trabajo", como dice él; contra Dimitrov llegó la mejoría; contra Zverev la exhibición; contra Khachanov el día de las dejadas y los recursos y contra Coric, la batalla física. "Estoy hecho un toro", decía el murciano (mismo mantra que los encuentros-maratón del pasado US Open) ante un primer set que duró una hora y dos minutos de una intensidad tremenda. Puntos eternos desde el fondo, desgaste, derechas con mucho efecto del español y su oponente presumiendo de revés...

El primer juego ya fue un adelanto con sus 12 minutos. El equilibrio lo rompió el murciano con un break en el quinto juego en un pequeño despiste de Coric, que regaló dos puntos y cuando se vio 0-30 se enchufó, pero ya era tarde. Hasta los juegos en blanco tenían su miga, nadie regalaba nada y los aficionados se lo estaban pasando en grande.

Pero una vez que Alcaraz se llevó ese primer parcial, ya supo manejar los tiempos. Tiene 20 años, sí, pero parece todo un veterano. Hubo un intercambio de breaks que no afectó al número dos del mundo. Parecía que apretaba cuando quería en un duelo ya más trabado, que fue avanzando a trompicones hacia la única dirección posible: una nueva victoria del defensor del título.