Wimbledon 2025 entra en su semana decisiva con los cuartos de final ya definidos y con tres nombres propios marcando el pulso del torneo masculino: Carlos Alcaraz, Novak Djokovic y Jannik Sinner.

Cada uno por su lado del cuadro, pero todos con el mismo objetivo: levantar el prestigioso trofeo sobre la hierba del All England Club el próximo domingo.

El camino de Carlos Alcaraz a la final de Wimbledon 2025

Carlos Alcaraz, que viene de conquistar Roland Garros y de una temporada brillante, ya está en cuartos de final tras vencer con autoridad al ruso Andrey Rublev. El murciano se mostró sólido, agresivo y con esa mezcla de potencia y temple que lo ha convertido en el número uno del tenis mundial.

Tras el partido, Alcaraz declaró a pie de pista sentirse “en su mejor momento físico y mental” y que jugar en Wimbledon “siempre es especial”. En los cuartos de final se enfrentará al británico Cameron Norrie, un duelo que promete emociones fuertes, especialmente por el ambiente local que empujará al tenista de casa.

Sin embargo, Alcaraz ya ha demostrado que ni la presión ni el entorno son capaces de afectarle. Va con paso firme hacia su tercer Wimbledon consecutivo, un hito que lo colocaría aún más cerca del olimpo del tenis.

Novak Djokovic: la amenaza silenciosa

Aunque aún debe disputar su partido de octavos ante el australiano Alex de Miñaur, Novak Djokovic sigue siendo un claro aspirante al título. El serbio, que busca redimirse tras una temporada irregular, ha ido de menos a más en el torneo y empieza a desplegar ese tenis milimétrico y elegante que tantas alegrías le ha dado en la hierba londinense.

En caso de superar a De Miñaur, el balcánico se enfrentaría en cuartos al ganador del duelo entre Marin Cilic y Flavio Cobolli, dos jugadores que han mostrado un nivel notable, pero que sobre el papel no deberían ser un obstáculo insalvable para Djokovic. Todo apunta a que el destino lo empuja a un posible choque en semifinales contra Alcaraz o Norrie, lo que sería una reedición de grandes batallas recientes.

Sinner: candidato al título

Jannik Sinner, por su parte, se verá las caras en cuartos con el ganador del cruce entre Shelton y Sonego, después de haber superado con solvencia a Grigor Dimitrov.

El italiano ha dejado atrás las dudas que generó su rendimiento en tierra batida y se ha adaptado a la perfección a la hierba. Su tenis ofensivo, acompañado de una excelente movilidad, lo convierten en un rival temible para cualquiera.

Si bien su camino hacia la final luce más despejado que el de Alcaraz y Djokovic, Sinner necesitará mantener la regularidad y sangre fría para llegar a su primera final en Wimbledon.

Cuartos de final cuadro masculino

Así está el cuadro masculino para cuartos de final en Wimbledon 2025:

• Sinner - Dimitrov vs. Shelton - Sonego

• Cilic - Cobolli vs. De Miñaur - Djokovic

• Fritz vs. Khachanov

• Norrie vs. Alcaraz

Cuadro femenino: Sabalenka, la gran favorita en Wimbledon 2025

En el cuadro femenino, la competición se encuentra aún con dos partidos de octavos por disputar, pero ya se han producido varias sorpresas. Las eliminaciones de Barbora Krejcikova y Elena Rybakina han dejado abierta la posibilidad de una nueva campeona.

Aryna Sabalenka, actual número uno del mundo, es la principal favorita. Viene de una contundente victoria ante Elise Mertens, desplegando un nivel altísimo. Su siguiente rival será Laura Siegemund, una jugadora peligrosa pero muy por debajo en ritmo y físico.

También siguen en carrera nombres como Anastasia Pavlyuchenkova, Amanda Anisimova, Mirra Andreeva, Belinda Bencic, Iga Swiatek y la española Jessica Bouzas, quien ha sorprendido con su rendimiento y se enfrentará a la potente Liudmila Samsonova.

Cuadro femenino de cuartos de final

• Sabalenka vs. Siegemund

• Anisimova vs. Pavlyuchenkova

• Andreeva - Navarro vs. Alexandrova - Bencic

• Swiatek - Tauson vs. Samsonova - Bouzas

La semana final de Wimbledon promete tenis de altísimo nivel y posibles duelos memorables. Todos los focos están sobre Alcaraz, Djokovic y Sinner, pero las sorpresas son parte del ADN del Grand Slam británico. La historia está por escribirse en Londres.