LaLiga Santander

Un derbi para decidir el futuro campeón de liga

Atlético de Madrid y Real Madrid llegan al derbi con la necesidad de ganar si quieren seguir optando al título

Diego Pablo Simeone y Santiago Hernán Solari
Diego Pablo Simeone y Santiago Hernán Solarilarazon

Atlético de Madrid y Real Madrid llegan al Wanda con la necesidad de ganar para tratar de seguir en la lucha por el título. Una derrota de los blancos les dejaría prácticamente sin opciones de salir campeón.

Atlético de Madrid y Real Madrid llegan al derbi con la necesidad de ganar si quieren seguir optando al título de liga. El equipo de Simeone regresa al Wanda después de la debacle de Sevilla, donde el equipo se dejó los tres puntos en un partido en el que no mereció ganar, pero tampoco perder y que supuso el debut oficial de Álvaro Morata con la elástica rojiblanca y que protagonizó la jugada polémica del partido, por un penalti que no le señalaron con el empate a cero en el marcador.

En el fútbol mandan los resultados, pero el futuro inmediato lo marcan las sensaciones. Y el equipo del Cholo no pasa por su mejor momento. A pesar de que nunca de ser fiable, atraviesa una pequeño bache. Incapaz de ganar al Girona en los dos partidos (todavía no lo ha hecho desde que el conjunto catalán ascendió a Primera) y que le costó la eliminación, perdió con el Betis y desaprovechó el empate del Barcelona en casa con el Valencia, que parece que comienza a carburar. Así, el derbi se presenta con el Atlético a seis puntos del conjunto de Ernesto Valverde, que debe rendir visita al nuevo San Mamés, ante un Athletic al que Garitano le ha cambiado la cara. Además, esta eliminación de la Copa le libera de algunos partidos durante estos meses, lo que le puede hacer llegar con ventaja al tramo final de liga, en el que se espera que ya pueda contar con toda la plantilla.

Para el partido de esta tarde, Simeone sigue sin poder contar con Diego Costa y Koke Resurreción, pero contará con el apoyo del público y el debut de Morata ante su nueva afición.

Enfrente estará el Real Madrid, al que están acompañando los resultados, pero sobre todo las sensaciones. Esta temporada está siendo una montaña rusa para el conjunto de Chamartín, que pasó de enamorar tras el partido de Champions con la Roma, a caer en el más profundo de los abismos. Tras la caída de Lopetegui y el comienzo de Solari lleno de obstáculos, el equipo ha logrado una identidad, es más sólido, solidario y ha recuperado el gol con un Benzema en estado de gracia y el regreso de Luca Modric, que ha estado desaparecido durante los primeros meses pero que ya comienza a ser el jugador que se vio la pasada temporada y que fue merecedor de todos los galardones al mejor jugador de la pasada campaña.

El entrenador blanco ha superado las crisis de Isco y Marcelo y comienza a tener la enfermería vacía. Mientras tanto, el equipo ha recuperado el tono físico y ejecuta en el campo lo que Solari les indica en el vestuario. Solari está consiguiendo que todos los jugadores estén "enchufados"y que todos tengan que ganarse la titularidad. Así, el pasado miércoles Llorente entró en lugar de Casemiro y fueron los mejores minutos del Madrid en el Camp Nou. Marcelo necesita recuperar su tono físico y la confianza, pero delante tiene un duro escollo. Reguilón ha aprovechados sus oportunidades y es, de momento, el titular en la banda izquierda. Además, el brasileño, fue uno de los señalados del Camp Nou, por su despiste defensivo en el gol del empate de Malcom. Pero Solari ha logrado un equipo titular de 15 titulares. Bueno, 14 más Vinicius, la esperanza blanca que volverá a ser titular contra el Atlético, equipo contra el que debitó en la primera vuelta. Caso aparte es el de Isco. El malagueño se ha quedado fuera de la lista por unas molestias en la espalda, pero la realidad es que está lejos de su mejor momento y Solari tampoco parece que vaya a darle muchas oportunidades.

El equipo madridista se enfrenta a una de sus bestias negras de los últimos años. El Atlético de Simeone es el primer obstáculo para tratar de seguir con opciones en liga. A ocho puntos del Barcelona, una victoria se convierte en imprescindible a la espera de que el club azulgrana, con la duda de Messi y Artur, vuelva a pinchar y así reducir distancias. Con cinco puntos de desventaja, pero a la espera de que los de Valverde visiten el Bernabéu, la liga seguiría abierta.

A ninguno le vale el empate. Así que para rojiblancos y madridistas, la liga pasa por el Wanda... y por el nuevo San Mamés.