Euroliga
Un título y dos leyendas
El Madrid busca la «Novena» ante el Olympiacos del invicto Spanoulis.
El club más laureado de Europa persigue la «Novena». Vassilis Spanoulis, seguir invicto en la que es su cuarta «Final Four». La estrella del Olympiacos ha jugado siete partidos en las fases finales de la Euroliga y no ha perdido ninguno. Se repite la final de 2012, también el partido que dio la última Copa de Europa al Real Madrid hace 20 años en Zaragoza. El equipo de Pablo Laso está donde se esperaba y donde el propio grupo se había obligado a llegar desde que empezó la temporada. Ahora, además, puede lograr un título que cicatrice algunas de las heridas futboleras surgidas durante la semana. Con los griegos nadie contaba hasta tres minutos antes de que acabase su taquicárdica semifinal con el CSKA.
El Real Madrid, por tercera temporada consecutiva está presente en el partido más importante del año. Las derrotas precedentes –Olympiacos y Maccabi– parecen olvidadas en un bloque que llega más armado que nunca al día clave. Es lo que transmite el equipo y lo que reconocen los jugadores dentro del vestuario. «Hay que rendir cuentas y trabajar para que el objetivo se cumpla», asegura Ayón. El desarrollo de la semifinal ante el Fenerbahçe y la importancia de actores secundarios –Rivers, Nocioni y Ayón– han fortalecido todavía más al anfitrión. Pablo Laso lo ratificó: «Llegamos con menos problemas físicos y más enteros que el año pasado». Al aviso respondió Sfairopoulos, el entrenador de los griegos: «El Real Madrid es el gran favorito, pero si cumplimos con nuestro plan tendremos opciones de ganarlos». Ese plan pasa por otro partido enorme de Spanoulis, el trabajo colectivo del resto del equipo y frenar el ritmo vertiginoso del Madrid. Hay quien recuerda que en la final de hace dos años en Londres, Olympiacos se impuso anotando 100 puntos, pero aquel partido supone una excepción en la trayectoria del admirable equipo griego. La resurrección de Spanoulis en los últimos 3:39 de su partido del viernes ha convertido al escolta, como si no lo fuera ya, en el enemigo público número uno. Su leyenda habla de tres títulos –uno con Panathinaikos y dos con Olympiacos– que han coincidido con los tres embarazos de su esposa. La Miss Grecia 2006 también está embarazada en la fase final de Madrid.
Para detener a Spanoulis, algo que logró el CSKA durante más de 35 minutos, Laso cuenta con argumentos. «Se le puede parar», ha comentado. Llull, Rudy, Rivers... los exteriores del Madrid se turnarán para intentar que el líder de los griegos no sea tan decisivo como ante los rusos. Pero Spanoulis no está solo. Printezis es la otra referencia. El ala-pívot, ex de Unicaja, ya sabe lo que es ganar una Euroliga con una canasta suya en el último segundo. Fue en 2012 ante el CSKA después de remontar 29 puntos en 12 minutos. Printezis lleva la final a otro escenario: «Tal y como está la situación en nuestro país es un asunto nacional independientemente de que juegue Panathinaikos u Olympiacos. Mucha gente está orgullosa de que lleguemos a la final y estamos frente al favorito». Porque ésa es la condición del Madrid. Los más veteranos lo tienen claro. «Es la hora de volver a ganar la Copa de Europa», dice Ferrándiz. «El equipo tiene pinta de campeón de Europa», comenta Rullán. Zoran Savic, ex de Madrid y Barça y tres veces campeón de Europa, es uno de los «vips» que poblarán las gradas del BarclayCard Center. Él también ve por delante al Madrid, pero... «El Madrid en los últimos tres años ha sido el mejor equipo del continente. Su línea exterior es increíble, es la mejor que ha habido en Europa en los últimos 10-15 años, pero el equipo va a tener mucha presión y ahí habrá que ver si tienen o no carácter, y el Olympiacos compite como nadie. Para ellos, el ambiente de la ‘‘Final Four’’ es como un partido de pretemporada porque llevan toda su vida con los Olympiacos-Panathinaikos». La leyenda del mejor club del siglo XX se mide al jugador más decisivo del XXI.
✕
Accede a tu cuenta para comentar