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Black Friday

España enloquece con el “Black Friday”

Somos el segundo país tras Rusia en pedidos del Festival AliExpress y los más fanáticos de Europa durante el Viernes Negro: el 90% de los españoles comprará, sobre todo artículos tecnológicos, una media de 205 euros.

Imágenes de recurso del Black Friday
Cartel publicitario del Black Friday con una imagen de Carlos SoberaRicardo RubioEuropa Press

Los españoles han entrado en estado de "shock". Entre sacudidas y balbuceos en lenguas extintas aún tenemos tiempo de clicar en el móvil y seguir comprando. Sin parar. Cuantas más rebajas nos anuncien, mejor. Por eso, nos hemos convertido en el segundo país tras Rusia en realizar más pedidos durante el Festival Mundial de Compras de AliExpress y, por eso también, batiremos todos los récord durante el próximo "Black Friday". La "festividad" consumista que se celebra este 29 de noviembre ha convertido en devotos a millones de españoles. En 2018, el "Black Friday" movió en España 1.560 millones de euros, un 10% más que el año anterior, según la Asociación Española de la Economía Digital. Sin embargo, para este año se prevé un aumento que llegará a los 1.700 millones. El 90% del país comprará algo, con un gasto medio de 205 euros, según Tiendeo.

Los artículos que encabezarán las listas de las compras de los españoles serán los televisores, tablets e incluso los electrodomésticos, en resumidas cuentas, los productos electrónicos y tecnológicos representan 52% del gasto de los españoles, según el comparador Acierto.com. Les siguen, con un 45% las prendas de ropa y complementos, un 11% en juguetes y en decoración y otro 6% gastará en mobiliario. Esta consolidación del gasto por consumidor no solo abarcará las tiendas físicas, sino que se extenderá, como ha hecho desde 2012 que aterrizó en España, al comercio electrónico.

En esta línea, se prevé que un 65% de los españoles comprará a través de páginas webs "pure-player" como Amazon (frente al 47% de media europea) y un 44% a través de las páginas de los distribuidores (frente al 30%), según el último estudio de la consultora Oliver Wyman. Además, en el caso del gigante del comercio electrónico, la campaña de "Black Friday" de este año supondrá "el mayor día de ventas de 2019".

Este aumento de las compras online traerá consigo una actividad frenética para las empresas de paquetería y logística que moverán alrededor de 3,5 millones de paquetes el lunes siguiente al "Black Friday", el 10 % más que en 2018. Durante las semanas posteriores se repartirán, de media, 2,5 millones de paquetes al día, el 10 % más que un año antes, según la patronal sectorial UNO. El empleo también es otro ámbito que se ve favorecido en esta jornada. En 2019, se estima que las contrataciones alcancen las 32.050, el 4,8 % más respecto a 2018.

Desregularización de rebajas

No obstante, el Viernes Negro trae consigo una serie de "costes o perjuicios", tanto para el comercio como para los consumidores. Para el presidente de la consultora Oliver Wayman, Luis Baena, se trata de un "fenómeno de desestacionalización en la compra, algo que ya se ha implementado en Estados Unidos, y con la que los "retailers" han dejado de centrar la mayoría de sus ventas en periodos como la Navidad y las rebajas para distribuirlas en promociones a lo largo del año". En esta misma línea, el presidente de Acotex, Eduardo Zamácola, explica que "el Viernes Negro tiene un efecto pernicioso", ya que implica "una desregularización de las rebajas".

En cuanto al comportamiento de los usuarios de esta campaña, el profesor de EAE Business School Gaietà García asegura que en "los últimos 30 o 40 años ha aumentado la oniomanía, o compra compulsiva, que produce a quienes la padecen un efecto estimulante, relajante y psicotrópico cuando adquieren una ganga". Y es que, el "Black Friday" es la excusa perfecta para dejarse llevar por el impulso comprador y "una puerta abierta al desarrollo de una patología que quizá padece un porcentaje alto de población sin ser consciente de ello", explica Gaietà. Por ello, advierte de que "debemos tomar conciencia sobre si la compra que efectuamos responde a la satisfacción de una necesidad física, emocional o de desequilibrio mental