Especiales

Coronavirus

Las constructoras no cotizadas avisan de quiebras en cascada si no les inyectan 1.000 millones

Advierten de que las líneas de avales y los reequilibrios concesionales no solucionan sus problemas de flujo de caja

Los concursos de empresas descienden en Andalucía un 36,3% en marzo y crecen las disoluciones un 1,5%
Imagen de archivo de la construcción de un edificiolarazonUGT

Liquidez, y con urgencia. Eso es lo que la construcción necesita para sobrevivir. El sector se ha visto abocado a parar al no ser considerado por el Gobierno como uno de los esenciales para combatir la pandemia del Covid-19. Y este freno a su actividad amenaza con llevarse por delante a un buen puñado de sus empresas. “La única solución para mantener las empresas en funcionamiento (todas las del sector) y poder reanudar la actividad del sector de la construcción cuando llegue el momento, pasa pormantener los flujos de caja”, ha advertido hoy en un comunicado Anci, la patronal que agrupa a constructoras no cotizadas como Copisa o Sando.

Para la organización, “las medidas como las que hasta ahora se han contemplado, como líneas de avales o, en el caso de concesiones, reequilibrios mediante ampliación del plazo de la misma, son insuficientes” a efectos de que las firmas consigan una liquidez que, si no obtienen, “va a abocar a las empresas a defenderse mediante el concurso, abocados en muchos casos a la liquidación”.

Propuestas

Anci propone dos vías para mantener esos ingresos. La primera no implicaría un incremento de gasto y se podría hacer con los presupuestos ya consignados. En el caso de las obras, implicaría certificar y abonar los trabajos de marzo con la mayor celeridad posible y abonar anticipos en función del presupuesto anual. Para las concesiones, Anci solicita abonar el mes tomando como referencia el de otro año “normal”. En el caso de obras privadas, la patronal propone solicitar al sector bancario la prórroga de los vencimientos y obligaciones de pago al menos dos años hasta que se recupere la demanda.

En el caso de las medidas que implicarían un incremento del gasto por parte de las administraciones, en las obras, Anci pide regular mediante un expediente de daños los gastos sobrevenidos por la situación generada por la suspensión de la actividad y que deberá valorarse para cada obra. Para las concesiones, propone regular también mediante un expediente de daños aquellas concesiones que generan sus propios ingresos, como parkings, gimnasios, etc… en las que sus ingresos han caído a cero. Estas concesiones presentan “un riesgo muy alto de cierre en un plazo muy breve de tiempo por el acusado desequilibrio ingresos-gastos”, advierte Anci. La patronal asegura que estas últimas medidas son aquellas que consideran actividades no contempladas en los presupuestos de las obras así como las necesarias para mantener las concesiones que generan sus propios ingresos. Para estos casos en particular es fundamental el reconocimiento de la existencia de “fuerza mayor”, “lo que es indudable en las circunstancias que estamos viviendo y de conformidad con lo indicado por la Unión Europea”, añade.