Energía

¿Dónde metemos tanto petróleo?

El crudo de Texas se paga a 11 dólares tras cotizar en negativo por primera vez en su historia el pasado lunes. El Brent europeo está a menos de 17 dólares el barril con las reservas mundiales a reventar y sin salida en mayo por la hibernación global.

A 3D-printed oil pump jack is seen in front of displayed stock graph and "$0 Barrel" words in this illustration picture
El sueño del petróleo regalado se cumplió el pasado lunes, cuando se llegaron a pagar 40 dólares por deshacerse de los barriles con entrega en mayoDADO RUVICReuters

El petróleo es América como antes lo fue el oro. No se puede entender Estados Unidos sin comprender las fiebres que llevaron a millones de personas a emprender un sueño en pos de la fortuna arrancada de las entrañas de la tierra. Primero a California, a mediados del XIX, y luego en Pensilvania, donde por la misma época se extendió el uso del queroseno para sustituir al aceite de ballena en el alumbrado de las pujantes ciudades estadounidenses. De allí se pasó a Oklahoma, Luisiana y la Standard Oil Company de Rockefeller y luego Texas, donde en sus pozos de la costa del Golfo surgieron gigantes como Texaco. Lo demás es historia. Los negros chorros de riqueza crearon el combustible necesario para generar la mayor época de expansión económica de la historia y consolidar a EE UU como primera potencia del siglo XX. Pero la dependencia cada vez mayor del crudo saudí, al haberse duplicado la demanda americana entre 1945 y 1970, y la primera crisis del petróleo de 1973, en la que los países de la OPEP dejaron de vender crudo a EE UU y sus aliados por haber apoyado a Israel en la guerra del Yom Kipur, dieron origen a la creación de las reservas estratégicas de petróleo en 1975. Hoy esas reservas están a reventar mientras el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, anuncia que almacenará otros 75 millones de barriles aprovechando el bajo precio del crudo. Aún no se sabe si pasarán a la reserva del país o simplemente se almacenarán para las petroleras, La Reserva Estratégica de Petróleo de Estados Unidos es la más grande del mundo y tiene capacidad para unos 800 millones de barriles almacenados en tanques de Texas y Luisiana.

La disparidad petrolera más grande entre oferta y demanda, por la paralización de la actividad global mientras los yacimientos siguen bombeando, ha provocado este hundimiento. Si bien la OPEP y sus aliados productores de crudo finalizaron un pacto a principios de este mes para reducir la producción en 9,7 millones de barriles por día a partir del 1 de mayo, se teme que no sea suficiente para contrarrestar la caída de la demanda.

Sin espacio en los tanques

Mientras, las instalaciones de almacenaje de crudo de EE UU, como la de Cushing (Oklahoma), están al máximo de capacidad. Quien adquiriera crudo para entrega en mayo debe comprometerse a recoger 1.000 de esos barriles de los depósitos de Cushing, donde se realizan las entregas de contratos de futuros de crudo en Estados Unidos. El almacen tiene una capacidad para 80 millones de barriles, pero según la consultora Rystad Energy, solo queda espacio para 21 millones de barriles, equivalente a dos días de producción estadounidense.

Normalmente, el mundo consume unos 100 millones de barriles diarios, pero con la mayor parte de la economía mundial en hibernación por el coronavirus, la demanda ha caído por debajo de los 90 millones de barriles diarios, según datos de la Agencia de Información de la Energía de Estados Unidos (EIA). Según Rystad Energy, si los precios del barril del referente en Europa, el Brent (actualmente en el entorno de los 30 dólares) caen por debajo de los 20 dólares, la industria petrolera se enfrenta a pérdidas de ingresos de cerca del 80%.

Ante la posibilidad de colapso de la industria petrolera, gran contribuyente a las campañas políticas americanas y en año electoral, Trump ha ordenado diseñar un plan de rescate que ponga a disposición de las empresas los fondos necesarios y permita mantener el empleo ante la crisis. “Nunca dejaremos caer a la gran industria de petróleo y gas de EE UU ¡He dado instrucciones al secretario de Energía y al secretario del Tesoro para que formulen un plan que ponga a disposición fondos para que estas empresas y empleos tan importantes estén asegurados en el futuro!”, afirmó Trump a través de su cuenta personal en la red social Twitter.

El barril de Texas cotiza hoy a 11,3 dólares el barril mientras el Brent, de referencia en Europa, lo hace a 17,1 dólares.