Energía
Buques fantasma, trenes y cuevas de sal para guardar petróleo
Decenas de petroleros han sido contratados en los últimos días para almacenar 30 millones de barriles ante la falta de espacio en los depósitos en tierra. Las consultoras energéticas prevén un desplome en mayo aún peor en que el sufrido el pasado lunes, cuando el barril de Texas cotizó a -37 dólares
El desplome del 30% en la demanda de crudo ha llenado los depósitos de almacenaje como nunca en la historia. En los últimos 100 años, en los que el petróleo ha reinado, jamás se había visto una caída simultánea y de la misma intensidad en todo el mundo. El resultado: ningún lugar del planeta necesita más crudo. Mientras la producción se reduce, pero no se detiene, se acumulan las entregas con todos los tanques de almacenaje en tierra hasta los topes. Ante esta situación los tratantes petroleros han optado buscar soluciones “imaginativas”. La primera opción ha sido contratar docenas de petroleros para almacenar hasta 30 millones de barriles de queroseno de avión, gasolina y diésel en alta mar. Con esto, se sobrepasan los 150 millones de barriles que se encuentran almacenados en las tripas de los buques, según fuentes consultadas por la agencia Reuters.
El crash vivido el pasado lunes, cuando los intermediarios llegaron a pagar 37 dólares por barril a quien se los llevara para no tener que pagar los costes de transporte y almacenaje, ha agudizado el ingenio en el mercado. Miles de vagones de mercancías varados por la falta de movimiento a causa del confinamiento en la red ferroviaria próxima a las refinerías está sirviendo también de almacén improvisado. Esta opción se está utilizando sobre todo en el noreste de Estados Unidos. También se está recurriendo a los oleoductos en desuso y a las cuevas de sal. El escenario de guardar el crudo en enormes cavidades bajo tierra en los estados de Texas y Luisiana de composición salina, gracias a que la composición química de la sal y la presión evitan que se filtre el petróleo. En Europa, las cuevas utilizadas en Suecia, y en otros países nórdicos, están completas o con reservas ya selladas.
En lo que va de año, los precios del barril de WTI se han desplomado cerca de un 70% y se sitúan muy lejos de los 60 dólares de enero. El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) registró ayer un rebote del 23% que situaba el crudo en 14,24 dólares el barril. “El mercado petrolero está roto. Los centros de almacenamiento en todo el mundo no pueden manejar el exceso de oferta, ni en mayo, ni en junio. El próximo mes los operadores estarán exactamente en la misma situación, si no peor, a medida que la situación de almacenamiento se vuelva más grave”, señaló la consultora Rystad Energy en una nota a sus clientes.
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