Alemania sale al rescate de Lufthansa

Alemania sale al rescate de Lufthansa. Desde que el Covid-19 obligó al transporte aéreo a dejar en tierra prácticamente todos sus aviones, la aerolínea germana quema un millón de euros al día, según declaró días atrás su consejero delegado, Carsten Spohr. Y aunque aseguró que disponía de 4.000 millones de liquidez, el Ejecutivo de Angela Merkel ha decidido salir en ayuda de la otrora compañía de bandera germana. Según el semanario «Der Spiegel», el Estado alemán está dispuesto a inyectar 10.000 millones de euros en ayudas en la compañía. Aproximadamente, la mitad de esas ayudas serían a modo de participación en la compañía, lo que otorgaría a Alemania el control de un 25% de la empresa; o con garantías de dividendos de un 9%. El resto se repartiría entre ayudas a cargo de un fondo de crédito avalado por el Gobierno federal.

Un portavoz del Ejecutivo de Merkel confirmó ayer a la agencia Reuters la existencia de las negociaciones para un rescate al que el consejero delegado de Lufthansa ha puesto una línea roja: la entrada del Estado en su accionariado. «Necesitamos el apoyo del Gobierno, pero no la intervención del Gobierno», advirtió Spohr en un comunicado preparado para la semana próxima pero que fue desvelado ayer.

En paralarelo a sus negociaciones con Alemania, Lufthansa también ha entablado conversaciones para recabar ayudas parecidas de Austria, Bélgica y Suiza para sus filiales Austrian Airlines, Brussels Airlines y Swiss.

Con su decisión, Alemania sigue los pasos de otros países como Francia y los Países Bajos, que han tomado también la decisión de rescatar al grupo Air France-KLM; Italia, cuyo Estado asumirá el control de Alitalia; o Noruega, que busca también fórmulas para reflotar a Norwegian.

Donde las cosas no se mueven en la misma dirección es en España. Aunque las aerolíneas llevan insistiendo semanas en la necesidad de que el Gobierno mueva ficha, desde el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana insisten en que la UE fije unas reglas de juego comunes para todos los rescates. Pero la realidad es que otros países ya se han movido sin esperar a Bruselas.

Iberia y Vueling

Por el momento, las únicas ayudas dispuestas por el Gobierno son las del ICO. Y de este organismo depende que Iberia y Vueling logren ahora financiación fresca. Ambas compañías anunciaron ayer que han conseguido fondos de la banca para blindarse de los efectos del coronavirus. En concreto, han suscrito sendos contratos de financiación sindicada con varias entidades por importe máximo de 750 y 260 millones de euros, respectivamente, según informó a la Comisión Nacional de Mercados y Valores (CNMV) IAG, el holding al que pertenecen ambas aerolíneas.

No obstante, este dinero está condicionado a que el Estado mueve ficha. Ambas compañías informaron de que solicitarán al Instituto de Crédito Oficial (ICO) la concesión de sendos avales sobre las financiaciones, siendo dicha concesión «condición necesaria para la disposición de las mismas». El jueves, la patronal del sector aéreo (ALA) y varios sindicatos del sector solicitaron al Ejecutivo que eleve hasta el 90% las cantidades avaladas por el ICO en los préstamos concedidos al sector aéreo. De otro modo, temen que las entidades financieras cierren el grifo ante la incertidumbre que rodea el futuro a corto y medio plazo del transporte aéreo.

El acuerdo alcanzado por Iberia y Vueling tiene una duración de 5 años, con fecha de amortización el 30 de abril de 2023, estando Iberia y Vueling «facultados para proceder a su repago en cualquier momento, previa notificación al efecto».