No remonta

El turismo perderá el 80% de la facturación en Semana Santa

Las nuevas restricciones y las cancelaciones han rebajado las reservas hoteleras al 20%

El turismo no se recuperará esta Semana Santa. En la imagen, playa de Paguera, en Calviá (Mallorca)
El turismo no se recuperará esta Semana Santa. En la imagen, playa de Paguera, en Calviá (Mallorca)ENRIQUE CALVO

El turismo no verá la luz esta Semana Santa. El temor a una cuarta ola ha llevado a las administraciones a aprobar nuevas restricciones a la movilidad, recortes de aforo y otras medidas de control perimetral que mantendrán al sector con el gotero puesto «al menos hasta el verano. Si ahí tampoco remontamos, nos podemos despedir de muchos de de nuestros negocios». Así de contundentes y pesimistas se mostraron ayer las patronales turísticas en el I Foro de Turismo organizado por la patronal CEOE, en el que volvieron a exigir al Gobierno un plan de reapertura concreto, protocolos armonizados, acelerar la vacunación y la llegada inmediata de ayudas financieras.

Con este oscuro panorama, el sector turístico encara su segunda Semana Santa de pandemia, en la que todas las previsiones de los empresarios turísticos sitúan las pérdidas de facturación en torno a un 80% por la ausencia de reservas hoteleras, limitaciones a los viajes organizados y por las restricciones al turismo interno. Situación que puede empeorar aún más si se confirman las prohibiciones temporales a los viajes de vacaciones al extranjero que quieren imponer algunos gobiernos europeos, como Alemania, Reino Unido o Francia, con el objetivo de evitar los desplazamientos de sus ciudadanos a destinos vacacionales españoles, principalmente Canarias y Mallorca.

En el caso de los hosteleros, la pérdida de ingresos prevista estaría en torno al 50%, aunque desde Hostelería de España temen que si se aprueban las nuevas imposiciones administrativas para adelantar el cierre de los establecimientos a las ocho de la tarde –que ayer tumbaron las comunidades– se rebajen sus previsiones por debajo del 30%. «Sería un desastre y una vergüenza más», criticó José Luis Yzuel, presidente de esta patronal.

Eso significa que se mantendrían inalterables los pésimos datos registrados por el INE durante 2020, con caídas interanuales de la facturación en las actividades turísticas en torno al 80%: agencias de viajes (-87%), servicios de alojamiento (-79,9%) o transporte aéreo (-70,1%). El desplome de la hostelería, el sector del turismo con mayor empleo directo, fue del 59,6%.

El Banco de España ya cifró que la pérdida de turistas provocó un descenso de más de la mitad del superávit de la balanza de bienes y servicios, que pasó de alcanzar los 46.300 millones en 2019 a apenas 9.000 millones el año pasado, una caída del 80,6%, cifra que coincide casi a la décima con la que ya se espera perder durante la Semana Santa.

Y el golpe del parón turístico se ha extendido como la pólvora a todas las actividades relacionadas y, por supuesto, a las inversiones. El ultimo informe la consultora inmobiliaria CBRE confirma que durante el último año se ha paralizado la construcción de 198 hoteles, con un total de 27.182 habitaciones, que deberían haber estado operativas en 2024. Según sus datos, la inversión hotelera en España cayó un 61% hasta los 1.005 millones de euros, por debajo de los 2.500 millones registrados hace un año.

Por su parte, Exceltur recuerda que las empresas turísticas españolas siguen esperando las ayudas prometidas, mientras que en el resto de países europeos las compensaciones a fondo perdido se otorgaron hace meses. Además, esta patronal hotelera ha vuelto a reiterar que se necesitan medidas adicionales a las ayudas directas para recuperar al sector, como bonos familiares para alentar el turismo, exenciones y bonificaciones fiscales y de cuotas a la Seguridad Social, compensaciones en las facturas de luz y agua o moratorias para el alquiler de sus locales.

Los empresarios hoteleros advierten de que la mejora de los datos que se había venido registrando en las últimas semanas, con reservas al alza por la apertura del mercado europeo, ha sufrido un cambio de tendencia por las restricciones a la movilidad tras el aumento de la incidencia del virus en varios países emisores, que ha disparado las cancelaciones para estas fechas. Esta situación afecta sobre todo a Canarias y Baleares, y zonas como la Costa Brava, la Costa del Sol o la Comunidad Valenciana, que se conformarán con la demanda local, que apenas cubrirá el 20% del negocio habitual.

Por ejemplo, en Baleares solo se abrirán 93 hoteles, el 11,2% del total, frente a los 722 (el 85%) que lo hicieron en 2019. En Canarias se espera que el turismo extranjero sea mínimo, después de que el Gobierno germano confirmara al archipiélago entre los destinos a los que desaconseja viajar. Las aerolíneas que operan en las islas han programado 174.456 plazas, un 33% de la capacidad de 2019, de las que 92.114 serán con el extranjero, un 76,3% menos que antes de la pandemia. En Barcelona, otro destino estrella, dan por perdidas estas vacaciones y solo se mantendrá el 25% de sus establecimientos abiertos, apenas 110.