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Las sociedades de garantía, clave en la recuperación económica

Las nuevas líneas de avales y productos específicos son dos de las principales actuaciones a llevar a cabo por las SGR para superar la crisis de la COVID-19

La hostelería ha sido uno de los sectores más castigados por la pandemia
La hostelería ha sido uno de los sectores más castigados por la pandemiaVillar LópezEFE

La creación de nuevas líneas de avales, así como de productos específicos que faciliten la financiación, tanto de los sectores más afectados por la crisis de la COVID-19 como de los que presentan mejores perspectivas, son dos de las principales actuaciones que debería llevar a cabo el sistema nacional de garantías para contribuir a la recuperación económica de nuestro país.

Así se desprende del estudio «El papel de las SGR en la recuperación de la economía española», realizado por la Confederación Española de Sociedades de Garantía (SGR-CESGAR). El estudio también señala que el diseño de metodologías para identificar empresas viables y la ampliación de plazos y carencias de los avales son otras actuaciones importantes a tener en cuenta para beneficiar a los sectores más afectados por la crisis, como la restauración, la hostelería y el turismo.

Este informe profundiza en el papel que las sociedades de garantía (SGR) pueden jugar en la recuperación de la economía española, identificando actuaciones concretas que pueden desempeñar a nivel sectorial, pero también los retos y condicionantes que deberán afrontar a corto y medio plazo. El análisis se ha realizado contando con la opinión de expertos de varios perfiles como la consultoría, asociaciones empresariales, instituciones que colaboran con el sistema de garantías y directivos de las mismas SGR. En el análisis los expertos externos y los miembros de las sociedades de garantía comparten visión sobre el papel de éstas en la recuperación de la economía española. Y es que las repuestas de ambos grupos son similares en el 87,3 por ciento de las cuestiones.

SGR
SGRMiguel Roselló

El estudio comienza evaluando la actuación de las SGR durante la crisis de la COVID-19. Entre los principales efectos positivos, el informe señala el apoyo a las pymes, facilitando su acceso a financiación adicional y proporcionándoles mejores condiciones, lo que ha ayudado a evitar el cierre de empresas. Asimismo, los expertos destacan el apoyo por parte de las SGR a las pymes en la reestructuración del pasivo y la atención de todo el tejido productivo gracias a la capilaridad del sistema. En definitiva, hay un alto grado de acuerdo en que las sociedades de garantía se han mostrado como un actor próximo y comprometido en la crisis. Por su parte, entre los impactos negativos resaltan la falta de aportaciones al fondo de provisiones técnicas destinado a sectores afectados muy negativamente, lo que ha limitado el alcance de las SGR para llegar a más pymes y autónomos.

Entre los retos a los que se enfrentan las sociedades se encuentran, seguir apoyando a las pymes en esta situación, digitalizar en mayor medida su actividad y conseguir mayor apoyo institucional. Asimismo, la gestión de la morosidad y el desarrollo de nuevos productos y procesos se señalan como otros desafíos.

Apoyo a los sectores más afectados

El análisis también se centra en las actuaciones para respaldar a los sectores más perjudicados: restauración, hostelería, turismo y servicios culturales. Los expertos apuestan por el establecimiento de líneas y productos específicos para estas actividades, el diseño de metodologías para identificar y hacer el seguimiento a empresas viables dentro de estos sectores, así como la ampliación de plazos y carencias.

En el estudio también se han analizado las actividades a realizar dirigidas a los sectores con mejores perspectivas: Sector sanitario, servicios relacionados con la digitalización y las iniciativas vinculadas a la transición energética.

Según el estudio, las actuaciones más eficaces a llevar a cabo por las SGR para apoyar a dichos sectores en el escenario poscovid serían la oferta de productos específicos, la cooperación con otros actores que den soporte a las SGR en la evaluación de los intangibles de estos proyectos y la oferta de financiación con la colaboración de CERSA y comunidades autónomas. Asimismo, otras actividades importantes serían el apoyo a estos sectores para acceder a los fondos Next Generation y la adaptación de la regulación al riesgo y características de proyectos innovadores.

Innovaciones más importantes

En el estudio sobre «El papel de las SGR en la recuperación de la economía española» también se identifican las innovaciones más importantes que se deben llevar a cabo desde el sistema de garantías para facilitar la capilaridad y llegar así a más actores y sectores.

Entre las innovaciones de producto más señaladas, se encuentran aquellos adaptados a las necesidades de los sectores, sobre todo los emergentes; los préstamos ligados a los ahorros energéticos; los avales de productos financieros diferentes al crédito y el adelanto de las ayudas que se arbitren para las empresas en el campo de la digitalización, eficiencia energética y los más afectados por la crisis.

En cuanto a las innovaciones que las SGR deberían realizar en la prestación de los servicios, hay gran unanimidad entre los expertos en la importancia de ahondar en el proceso de digitalización de la actividad, optimizar recursos y simplificar trámites administrativos, así como dinamizar el acceso directo a clientes a través de acuerdos con asociaciones empresariales o cámaras de comercio.

Por último, el panel de expertos también indica nuevos actores con los que las SGR podrían establecer relaciones de cooperación que mejorasen la expansión y consolidación del sistema de garantías. Entre ellos, destacan las entidades que financian I+D+i, las asociaciones empresariales, así como el refuerzo de relaciones con actores que ya cooperan.