Ferroviario

Renfe cierra la compra del 50% de la operadora checa Leo Express

La operadora amplía así su presencia internacional tras el AVE a La Meca y la futura operación de la primera línea privada de alta velocidad en EE UU

Tren de Leo Express en Praga
Tren de Leo Express en PragaLa Razón

Renfe ha anunciado hoy oficialmente la adquisición del 50% del capital de la compañía ferroviaria checa Leo Express, que opera servicios en distintos países centroeuropeos. La operación, que cuenta con la autorización del Ministerio de Hacienda y se encuadra en el marco del proceso de internacionalización de la operadora española -aspira a obtener el 10% de sus ingresos a través de esta unidad de negocio en 2028-, constituye “una oportunidad de negocio estratégica para Renfe, que busca establecer alianzas y abrir nuevas vías de negocio fuera del mercado nacional”, según ha explicado la operadora. Los acuerdos de inversión y de accionistas suscritos entre las compañías española y checa contemplan una ampliación de capital del 50% de Leo Express, que es asumida por Renfe.

Leo Express es una compañía privada que empezó a operar en 2012 en República Checa. Desde entonces, ha desarrollado su negocio a través de la extensión de sus servicios a países como Eslovaquia y Polonia, así como con la adjudicación de licitaciones de obligación de servicio público (OSP) en la propia República Checa, que es una de las áreas donde buscan crecer. En Alemania, desde 2017, han estado operando para FlixTrain un servicio Open Access de larga distancia entre Berlín y Stuttgart. Asimismo, con el objetivo de alimentar sus servicios ferroviarios a través de la intermodalidad tren-bus, Leo Express ha operado diversas conexiones por carretera en República Checa, Eslovaquia, Austria, Polonia y Ucrania. Actualmente, debido a la crisis de la Covid-19, se limitan a operar servicios de ferrocarril en República Checa, Eslovaquia y Polonia.

Internacionalización de Renfe

Como consecuencia del actual proceso de liberalización del sector ferroviario -la operadora pública compite desde mayo contra la francesa Ouigo en el corredor de AVE entre Madrid y Barcelona y el año que viene lo hará también contra la alianza Ilsa-Trenitalia-, Renfe se ha marcado como objetivo en su Plan Estratégico conseguir un mayor grado de internacionalización de la compañía para compensar con los ingresos en el exterior los que perderá por la llegada de estos competidores a España.

La entrada de Renfe como socio principal en el accionariado de Leo Express tiene un beneficio directo para la compañía española, como es tener actividad en tres países europeos más (República Checa, Eslovaquia y Polonia) y disponer de los recursos y licencias para acceder al mercado alemán. Asimismo, le permitirá optar con carácter inmediato a licitaciones de OSP en Alemania, República Checa y Polonia, con capacidad de implantación local, experiencia, equipo, o referencias en esos países, muchas veces imprescindibles para poder concursar.

Renfe también valora que estaría mejor posicionada, igualmente, para acceder a los proyectos de alta velocidad que hay previstos en la región. República Checa, Eslovaquia y Polonia son tres países que tienen todavía mucho potencial de desarrollo de sus infraestructuras de transportes.

La entrada en centroeuropa marca el tercer hito internacional de la compañía española. En este momento, la compañía opera el AVE entre Medina y La Meca. En julio, la compañía y Texas Central firmaron el contrato que la convierte oficialmente en “early operator” del proyecto de primer AVE privado de Estados Unidos, mercado en el que la compañía sigue buscando más oportunidades. Para ello, ha constituido la filial Renfe of America.También ha obtenido el PQQ Passport, el documento del Departamento de Transporte del Reino Unido que permite participar en los concursos de concesión de franquicias ferroviarias en este país.