Papeles Pandora

La UE reduce la lista de paraísos fiscales en medio de “Pandora”

Anguila, Dominica y Seychelles pasan a la lista gris

Negociaciones acerca del Brexit en Bruselas
Negociaciones acerca del Brexit en BruselasJULIEN WARNANDAgencia EFE

En plena sacudida del escándalo sobre los papeles de Pandora, los Veintisiete han decidido sacar este martes de su lista negra de paraísos fiscales a Anguila, Dominica y Seychelles. Estos tres territorios formaban parte de este listado ya que no cumplían los estándares fijados por la OCDE sobe intercambio de información en este ámbito y los Veintisiete han decidido darles una oportunidad después de que el organismo les haya concedido una “revisión suplementaria”.

Esta paso ha levantado polvareda ya que la investigación periodística bautizada como papeles de Pandora ha revelado prácticas opacas de elusión fiscal que salpican a gobernantes y personalidades vinculadas a diferentes ámbitos de la élite mundial. Lo cierto es que, desde que los Veintisiete decidieran la puesta en marcha de esta lista en diciembre de 2017, se han producido constantes movimientos ya que el objetivo de esta iniciativa reside en la negociación con estos territorios para que comiencen a cooperar. El Parlamento Europeo considera, sin embargo, que este trasiego de categorías ofrece dudas sobre la credibilidad de los listados. En un informe aprobado a principios de este año, la Eurocámara también exigía que el procedimiento fuera más transparente y que se analizase también a los países miembros del club.

Tras la decisión tomada hoy, Anguila, Dominica y Seychelles pasan a lista gris de paraísos fiscales mientas que las lista negra está compuesta por Samoa Americana, Fiji, Palau, Panamá, Samoa, Trinidad y Tobago, Islas Vírgenes Americanas y Vanuatu. Además, las cancillerías europeas han aprobado que otros territorios como Costa Rica, Hong Kong, Malasia, Macedonia del Norte, Qatar y Uruguay forman parte de la lista gris, después de que se hayan comprometido a respetar las normas fijadas por la OCDE. Turquía se mantiene en esta lista gris, ya que aunque se haya registrado “avances”, no son suficientes según los criterios europeos.

Como modo también de luchar contra la evasión fiscal, los Veintisiete aprobaron la semana pasada un nueva normativa que exigirá a las multinacionales revelar los impuestos que pagan en cada país con el objetivo de que no puedan eludir los tributos mediante sofisticados ejercicios de ingeniería fiscal. Esto también incluirá a las empresas no europeas que operan en el territorio comunitario a través de filiales. Según los cálculos de Bruselas, esto supone unas pérdidas para las arcas de los países europeos de entre 50.000 y 70.000 millones de euros al año.