Malos números

El coronavirus dejará una factura de 756 millones de euros en las cuentas de Renfe

La división de viajeros, la más importante de la operadora, perderá 304,4 millones este año, que se sumarán a los números rojos de 414 millones del año pasado y a los 37,78 que prevé para 2022

Vista de un tren AVE junto al tren del nuevo servicio de alta velocidad de bajo coste de Renfe, Avlo
Vista de un tren AVE junto al tren del nuevo servicio de alta velocidad de bajo coste de Renfe, AvloMariscalEFE

La estrella del Grupo Renfe, la división de Viajeros, mejorará sus resultados con respecto a 2020 este año pero cerrará un ejercicio muy alejado de las previsiones que tenía. Según las cuentas recogidas en los Presupuestos Generales del Estado de 2022, Renfe Viajeros registrará este año unas pérdidas de 304,4 millones de euros, muy por encima de los números rojos presupuestados en las cuentas públicas de este año, 116,2 millones de euros. La cifra, por tanto, supone una desviación de 188,2 millones de euros sobre lo previsto inicialmente.

Estos 304,4 millones de euros se sumarán a los 414 millones que esta división perdió en 2020 y los 37,78 que espera todavía perder el año próximo por los efectos de la pandemia. En total, la crisis del coronavirus habrá dejado una factura al departamento más importante del operador público ferroviario español de 756 millones de euros.

A pesar de la recuperación de los viajes por la relajación en las restricciones impuestas por las autoridades, Renfe Viajeros no va a lograr cuadrar los ingresos que tenía previstos. Para este año, había presupuestados 1.758 millones de euros en ventas. Sin embargo, su facturación se va a quedar en 1.311 millones de euros, un 28,53% por debajo de lo esperado. Fuentes del sector atribuyen tamaña desviación a que las cuentas de 2021 se hicieron en el verano de 2020, cuando se daba por acabada la pandemia y se presuponía que en noviembre o diciembre de ese ejercicio se iba a recuperar “la normalidad”. O, al menos, un 80% del tráfico ferroviario anterior a la pandemia. Pero el coronavirus entonces estaba lejos de ser controlado y el final del verano del año pasado trajo la segunda ola. Y cuando el presidente de Renfe, Isaías Táboas, presentó las cuentas en el Congreso de los Diputados a primeros de noviembre, se había declarado ya el segundo estado de alarma -25 de octubre-, que se prolongó hasta bien entrado este año.

Recuperación de trenes

Para 2022, los Presupuestos prevén que el Grupo Renfe en su conjunto vuelva a beneficios y gana 7 millones de euros. La división de viajeros, no obstante, registrará otros 37,78 millones de pérdidas, si bien las cuentas avanzan que los ingresos se dispararán un 67%, hasta los 2.189 millones de euros empujados por la recuperación de frecuencias. En estos momentos, Renfe todavía no ha restaurado todas las circulaciones que tenía antes de la pandemia. Así, los servicios comerciales han retomado más del 70% de las circulaciones que había en 2019 y el compromiso que alcanzó la dirección de la compañía con el Sindicato de Maquinistas (Semaf) el pasado 7 de octubre para que esta organización desconvocara la huelga que estaba celebrando entonces es haber recuperado todas las frecuencias a mediados de 2022. Según el Semaf, en la actualidad, los servicios ferroviarios presentaban un déficit de 861 trenes menos al día, en comparación con un día similar de 2019. Esto supone 25.830 trenes menos al mes y 309.960 trenes menos al año.

Aunque recupere todos los servicios que tenía antes de la pandemia, el año que viene va a ser muy exigente para Renfe porque se enfrentará a la competencia no sólo de Ouigo, sino también de Ilsa. La compañía que cuenta con la participación de la operadora pública estatal italiana Trenitalia comenzará a operar en septiembre con su AVE “low cost”, lo que añadirá más presión a la empresa española en este segmento en el que compite con su marca Avlo.

Además de la división de Viajeros, también sufrirán pérdidas Renfe Mercancías y Renfe Fabricación y Mantenimiento. Según los Presupuestos, sólo lograrán beneficios el año que viene -y testimoniales- Renfe of America y Renfe Alquiler. Serán las ganancias inmobiliarias las que permitirán a la compañía salir de los números rojos, siempre que se cumplan las previsiones.