El Gobierno reduce del 10% al 5% la rebaja del alquiler necesaria para acceder a la bonificación del 90% en el IRPF

El Gobierno ha decidido reducir del 10% al 5% la rebaja que los caseros deberán aplicar en el precio de los alquileres para obtener la bonificación en el IRPF del 90% del rendimiento neto, la máxima que prevé el anteproyecto de Ley por el Derecho a la Vivienda, tal y como recogió ayer LA RAZÓN en este artículo.

La razón del cambio, han confirmado a Efe fuentes del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana (Mitma), es que con el 10% de bajada de precios podía no compensar la bonificación a un buen número de arrendadores y, por tanto, no resultaría efectivo como mecanismo de contención de rentas.

El anteproyecto de Ley de Vivienda, que el Consejo de Ministros tiene previsto aprobar el próximo martes 26 de octubre, recoge varias deducciones fiscales a las que podrán acogerse los propietarios de las zonas tensionadas. La desgravación general será del 50% y no del 60% actual para los nuevos contratos de alquiler, aunque se podrá modular hasta un máximo del 90% en función de diferentes variables.

Para optar a esa bonificación máxima era necesario bajar el alquiler de la vivienda un 10%. No obstante, según los cálculos realizados por el Sindicato de Técnicos del Ministerio de Hacienda (Gestha), la bonificación no compensaría la pérdida de ingresos causada por esta rebaja del alquiler. A raíz de estos cálculos, el Gobierno ha procedido a modificar este punto en el anteproyecto de la Ley de Vivienda para que sea aplicable siempre que los arrendadores de las zonas tensionadas rebajen los precios de los alquileres al menos en un 5%.

La normativa también contemplará un recorte que reducirá del 85% al 40% a las bonificaciones fiscales para las empresas de alquiler.