Automoción

El nuevo gigante de los coches eléctricos, ¿realidad o fiasco?

Rivian Automotive ya es la segunda automovilística por capitalización bursátil con solo 150 vehículos en el mercado. Los más escépticos dudan de que pueda entregar los 100.000 vehículos encargados por Amazon para 2025

Rivian ha producido hasta el momento 150 vehículos
Rivian ha producido hasta el momento 150 vehículosAnn-Sophie Fjello-JensenAgencia AP

Con solo 150 vehículos eléctricos en el mercado y nada más salir a bolsa, Rivian Automotive se ha convertido en la segunda compañía más valiosa del mercado, solo por detrás de Tesla y adelantando a General Motors. Salió al parqué el pasado 10 de noviembre con acciones a 78 dólares, que al cierre subieron a 106,75 dólares y que el viernes valían 129,95 dólares. Así, esta empresa californiana vale ya unos 100.000 millones de dólares y ha hecho historia: ha dejado por detrás a General Motors (con una capitalización bursátil de 86.000 millones) y a Ford (con sus 77.000 millones). Además, su salida a bolsa no solo ha sido la más grande del mercado global este año sino la más alta en Estados Unidos desde que Facebook diera ese paso en 2012 y la quinta más grande en la historia estadounidense.

Empecemos mencionando que este fabricante de automóviles eléctricos cuenta con el respaldo de dos gigantes como Ford, que controla el 12% de la empresa, y Amazon, que tiene el 20% y ha encargado 100.000 vehículos que tienen que ser entregados en 2025 (10.000 de ellos el próximo año). Solo esto ya indica la envergadura de la empresa y todo lo que hay en juego. Pero aunque la mayoría de los inversores y analistas lo ven como una oportunidad prometedora, los más conservadores desconfían alertando de que esto puede terminar en un sonoro fiasco. ¿El motivo? Pese a ser una compañía con 12 años de antigüedad, su primer vehículo salió al mercado el pasado mes de septiembre, la mayoría de ellos están en manos de empleados y todos los demás son encargos que tiene que fabricar y empezar a entregar el próximo año. Y la pregunta que ahora todos se hacen es si lo conseguirá. RJ Scaringe, CEO de Rivian, lo tiene claro: su planta de montaje en Illinois tiene capacidad para producir unos 150.000 vehículos al año y cumplirá lo prometido.

Los vehículos eléctricos están atrayendo cada vez con más fuerza la atención de usuarios e inversores desde que a mediados de 2020 gobiernos y fabricantes anunciaran que iban a fomentar su producción, con el objetivo de hacer frente al acuciante cambio climático. En este sentido, y según muchos analistas, Rivian ha hecho aquí una maniobra inteligente: buen conocedor de los gustos de los americanos (y con el encargo de Amazon de por medio), ha decidido centrarse en la fabricación de camiones, furgonetas, pickup y todoterrenos -aunque, según algunos medios especializados, ya está planeando la fabricación de coches de lujo-. Tesla también sabe que los pickup son una gran oferta en el mercado norteamericano, por eso tiene tanto empeño en tener listo cuanto antes su Cybertruck, cuyo lanzamiento se ha vuelto a ver retrasado hasta finales de 2022 por problemas de abastecimiento de materiales. Aunque a Rivian todavía le queda para alcanzar el billón de dólares de capitalización bursátil de Tesla, Elon Musk no menosprecia a sus competidores y no le quita ojo desde su retrovisor.