La inflación continúa desbocada al 6,5%, el mayor incremento desde 1992

La inflación se disparó en España a lo largo del 2021 hasta cerrar diciembre en el 6,5%, el dato más alto desde mayo de 1992, tras encadenar 10 meses consecutivos al alza, con el fuerte aumento de los precios de la electricidad como principal responsable. Al repunte de la luz, le siguió el aumento del coste de los carburantes, dos factores que, a su vez, encarecieron la cesta compra. Uno tras otro fueron contribuyendo a una imparable escalada de la inflación que el Gobierno no pudo contrarrestar pese a la bajada de impuestos sobre la electricidad.

Los datos publicados este viernes por el INE rebajan dos décimas el dato adelantado hace dos semanas y reflejan que el Índice de Precios de Consumo (IPC) aumentó un punto respecto a la cifra de noviembre (5,5%). Este dato confirmado supone que el IPC promedio de 2021 fue un 3,08%, el más alto desde 2011, cuando se situó en el 3,21%.

Responsables del repunte

En el comportamiento interanual del IPC destaca la subida de los precios de la electricidad, mayor en diciembre de este año que en igual mes de 2020, y de los alimentos, especialmente de las legumbres y hortalizas, del pan y los cereales y de la carne.

Asimismo, en esta ocasión los servicios de alojamiento se encarecieron en diciembre en comparación con el mismo mes de 2020 y la restauración subió los precios por encima de lo que lo hizo un año antes. No obstante, por el contrario, los precios de los carburantes y lubricantes para vehículos personales bajaron en el mes de diciembre de 2021, respecto a la subida que experimentaron el año anterior.

Sin tener en cuenta la electricidad y las variaciones sobre otros impuestos, el IPC interanual alcanzó en diciembre el 7,3%, ocho décimas más que la tasa general del 6,5%.

La inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos) aumentó en diciembre cuatro décimas, hasta el 2,1%, con lo que se sitúa casi 4,5 puntos por debajo de la tasa del IPC general. Es la tasa más elevada de la subyacente desde marzo de 2013.

En tasa mensual, el IPC encadenó su quinto repunte consecutivo al subir un 1,2% en diciembre, casi un punto por encima del ascenso registrado en el mes de noviembre.

En el último mes de 2021, el Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) situó su tasa interanual en el 6,6%, más de un punto por encima del mes anterior. Por su parte, el indicador adelantado del IPCA subió un 1,1% en tasa mensual.

Los efectos de la inflación en 2022

El Banco Central Europeo (BCE) cuenta con las herramientas para mantener a raya la inflación, pero se ha mantenido cauteloso ante el temor de que las iniciativas «en términos de política monetaria» puedan «afectar seriamente las medidas para estimular la recuperación de la economía tan afectada por el covid», explica Carlos Siemens, economista y profesor del MBA de VIU- Universidad Internacional de Valencia.

Este entorno inflacionista contribuyó a que la economía española atravesara en 2021 una tormenta perfecta, y aunque los analistas prevén una bajada del índice a medida que baje el año, los nubarrones aún no se han disipado. De hecho, 2022 arranca con dos dolores de cabeza para el Ejecutivo por esta materia: el debate sobre subir los sueldos para compensar la pérdida de poder adquisitivo en 2021 y el sobrecoste que ocasionaría la revalorización de las pensiones a la Seguridad Social en 2023 si los precios continúan disparados.