Estas son las ayudas para comprar un vehículo eléctrico en España

El mundo del automóvil avanza a marchas forzadas hacia un futuro eléctrico debido a los problemas de contaminación que deben hacer frente muchas de las grandes urbes en todo el mundo. Estos nuevos coches no emiten gases y provocan que las condiciones atmosféricas mejores si consiguen desplazar a los de combustión en lugares muy congestionados como puede ser una ciudad.

La aparición de este tipo de automóvil supuso toda una revolución que poco a poco ha ido ganando terreno hasta el punto de ser otra opción más en las compras de los ciudadanos. Así, la disminución de sus precios con el paso de los años ha fomentado que muchos se planteen la adquisición de este tipo de vehículos para dar el salto a una movilidad verde dejando atrás los coches de combustión.

El precio había sido uno de los grandes inconvenientes para la compra de estos coches algo que obligó a las administraciones a lanzar paquetes de ayudas y deducciones que promoviesen las adquisiciones. Estas solían ser muy escasas o limitadas y no conseguían ayudar en gran medida a muchos de los compradores aunque en la actualidad se ha tratado de mejorar esto con los planes de ayudas MOVE III.

Este nuevo plan pretende dar un paso más hacia esta movilidad verde tan ansiada por la Unión Europea y ofrece a los conductores algunos descuentos muy interesantes. Otros países europeos como por ejemplo Alemania han optado por reducir el IVA en los vehículos eléctricos aunque todavía no ha sido implementado en otras naciones.

Ayudas a vehículos eléctricos

Existen diferentes subvenciones para poder adquirir un vehículo de estas características gracias al plan MOVE III. Estos coches nos ayudaran a ahorrar en un futuro debido al coste de la energía menor que el de la gasolina y vienen regulados por el “Pacto Verde Europeo” que trata de dar el empujón definitivo a este tipo de automóviles.

A este plan, además, desde el 19 de enero se le ha añadido un nuevo tipo de subvenciones llamado plan Moves Flotas que pretende ayudar a electrificar las empresas que disponen de varios vehículos. Así, esta ayuda que ha entrado en vigor este enero quiere que las compañías que usan más motores de combustión hagan un cambio gradual a la economía verde con nuevos coches.

A continuación detallamos cómo son estas ayudas para cambiar a vehículos eléctricos:

• Los vehículos eléctricos cuentan con incentivos que van desde los 4.500 euros hasta los 7.000 euros para achatarrar un vehículo que tenga más de siete años.
• El límite del precio máximo del nuevo vehículo se ha estipulado en 45.000 euros antes de impuestos para particulares.
• En el caso de coches de particulares con 8 o 9 plazas el precio máximo asciende a 53.000 euros antes de las cargas impositivas.
• Las furgonetas pueden aumentar de 7.000 euros a 9.000 en caso de achatarrar un vehículo anterior.
• Las motocicletas también cuentan con un descuento de hasta 1.300 euros por pasarse al vehículo eléctrico.
• Las ayudas en las instalaciones de carga suponen el 70% del coste total de la obra.

Más descuentos

La tabla que podemos observar anteriormente recoge el precio de las ayudas aunque el plan MOVES III también cuenta con unos descuentos extra según donde residimos. Para incentivar el cambio eléctrico en todas las urbes también se destina una ayuda adicional de un 10%, incluidos los taxistas, para aquellos que estén empadronados en una ciudad con menos de 5.000 habitantes durante mínimo dos años.

Además, en el caso de las instalaciones de carga para estos vehículos residir en un municipio de estas características implica un aumento del 10%. Así, los habitantes empadronados en estas ciudades tendrán hasta el 80% del coste cubierto para sus estaciones.

En ella están incluidos los equipos, la instalación, el coste del proyecto y las tasas que acarrea este tipo de obra. Cabe destacar, además, que no es necesario disponer del coche para optar a esta ayuda y la obtención del vehículo puede ser posterior a la instalación del centro de carga.

Declaración de la Renta

Estas ayudas no se encuentran exentas de tributar en la Declaración de la Renta por lo que son consideradas como ganancias patrimoniales no derivadas de transmisión. Así, el importe a pagar dependerá del nivel de ingresos del contribuyente que puede variar según las circunstancias personales.