El IPC se modera al 6% en enero tras bajar cinco décimas por el menor coste de la electricidad

La inflación da un respiro en 2022 y arranca el año en el 6%, cinco décimas por debajo de la tasa interanual con la que cerró diciembre de 2021 (6,5%). Según los datos avanzados publicados este lunes por el Instituto Nacional de Estadística (INE), esta bajada se debe descenso del precio de la luz. No obstante, aunque el dato de enero introduce por primera vez la nueva base 2021, una modificación que se realiza cada cinco años para adaptarse a los cambios de consumo de los hogares y que incluye ahora las mascarillas, no ha incorporado el cálculo de la electricidad con datos del mercado libre que tenía previsto.

Con el dato de enero, el IPC interanual encadena su decimotercera tasa positiva consecutiva, aunque rompe la tendencia al alza durante 10 meses consecutivos. Este cambio se debe a la bajada de los precios de la electricidad frente a la subida que registraron en enero de 2021. Uno de los aspectos que iba a introducir el cambio de base era un nuevo cálculo de la electricidad teniendo en cuenta los datos del mercado libre.

Finalmente, este “ha tenido que ser aplazado hasta obtener la información que han de suministrar las compañías eléctricas con un suficiente nivel de detalle y con los criterios técnicos necesarios que permitan aplicar una metodología consistente con los requerimientos exigidos en el cálculo del IPC”, explica el INE en una nota de prensa. “Por otra parte, la situación errática del mercado en este momento no favorece la introducción de ningún cambio metodológico, que podría desvirtuar el análisis de la evolución de los precios a lo largo del año 2022 y siguientes”, añade.

Descenso mensual del 0,5%

En tasa mensual, el IPC rompió con una racha de cinco meses de ascensos al registrar en enero una disminución del 0,5% respecto a diciembre de 2021, su mayor bajada desde el pasado mes de julio. El INE publicará los datos definitivos del IPC de enero a mediados de febrero.

El INE también incorpora en el avance de datos del IPC una estimación de la inflación subyacente (sin alimentos no elaborados ni productos energéticos), que aumentó en enero tres décimas, hasta el 2,4%, con lo que se sitúa más de tres puntos por debajo de la tasa del IPC general. Este dato es especialmente relevante, ya que elimina los efectos transitorios y por ello se utiliza como índice de referencia para la inflación a largo plazo. Precisamente, teniendo en mente el largo plazo, la vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, ha avanzado que el Gobierno espera que la inflación continúe en niveles elevados durante la primera parte del 2022, lo que provocará que el IPC medio al cierre del año oscile entre el 3% y el 4%, por encima de la tasa registrada durante el pasado ejercicio (3,1%).

“El año pasado tuvimos un alza del IPC medio del entorno del 3% y este año estará entre el 3 y el 4%, pero organismos como el Banco Central Europeo o el Banco de España prevén una caída de cara a la segunda parte del año”, ha insistido la también ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, tras asistir en Málaga a la puesta en marcha de un centro europeo de I+D de Vodafone. Escenario en el que ha defendido que este rebote de los precios “no debería sorprender” en un contexto de “fuerte recuperación económica” tras la pandemia.

Los cambios que implica la nueva base

Estadística ha destacado que con la implantación de la nueva base se incorporan novedades metodológicas que mejoran la precisión del indicador, así como cambios en la composición de la cesta de la compra y una nueva estructura de ponderaciones.

El cambio de base es un proceso que se realiza cada cinco años para renovar el IPC mediante su adaptación a los cambios en las pautas de consumo de los hogares y la incorporación de mejoras metodológicas. Así, el IPC base 2021 incorpora nuevos tratamientos para el seguimiento de los precios del vestido y para el procesamiento de la falta de precio, y actualiza la relación de subclases, de forma que desaparecen del cálculo del IPC 24 subclases y se incorporan dos nuevas.

Los cambios más destacables en la configuración de la cesta son la incorporación de las mascarillas higiénicas y la suscripción a la prensa ‘online’. De la cesta desaparecen artículos como el reproductor de imagen, el reproductor portátil o el compact-disc y el DVD, entre otros.

Como consecuencia de estos ajustes, la cesta de la compra del IPC base 2021 pasa a tener 955 artículos (de los cuales 462 son de recogida tradicional y el resto se recogen mediante ‘scanner data’), frente a los 977 de la base anterior (con 480 de recogida tradicional).