Telefónica recibirá 1.161 millones en dividendos de su filial británica

Telefónica recibirá 969 millones de libras (1.161 millones de euros al cambio) en dividendos de Virgin Media O2, su filial en Reino Unido con Liberty Global, que también percibirá una cantidad equivalente. La compañía presentó este viernes unos resultados en los que se desglosa un pago a los accionistas de 332 millones de libras (385 millones de euros) en el cuarto trimestre y se incluyen pagos futuros para el próximo ejercicio de 1.600 millones de libras (1.917 millones de euros).

Telefónica y Liberty Global además confirmaron contactos con socios financieros para crear una filial de fibra óptica que construya una red que llegue a siete millones de hogares en el próximo año y tenga a Virgin Media O2 como cliente ancla.

Virgin Media O2 ha alcanzado beneficios por 18,3 millones de libras (casi 22 millones de euros) en 2021 en su primer ejercicio tras la fusión entre O2 y Virgin. Los negocios fusionados de ambas compañías se han combinado para lograr unos ingresos de 10.383 millones de libras (12.444 millones de euros) y un beneficio bruto de explotación ajustado (Ebitda ajustado) de 3.673 millones de libras (4.402 millones de euros), un 1,9% más.

La operadora ha ganado 2,6 millones de clientes (incluyendo IoT, el llamado «internet de las cosas») en el sector móvil y 141.600 en el segmento fijo. Así, cierra el año con 32,2 millones de clientes móviles, más 9,9 millones de clientes mayoristas y 5,7 millones de clientes de banda ancha fija.

La fibra óptica es una de las apuestas centrales del nuevo operador, que ha sumado 328.000 hogares pasados por fibras a su huella y actualizado a 1 Gbps la fibra de 15,6 millones de unidades inmobiliarias. La compañía espera, sin contar con la operación con socios financieros, desplegar en otro millón de hogares en 2022. Asimismo, el operador también ofrece servicios 5G en más de 300 ciudades y busca llegar al 50% de la población de Reino Unido en 2023 con despliegues en la banda de 700 MHz.

Virgin Media O2 explicó que la caída de la facturación estuvo acompañada por «aumentos en los consumos fijos» y «otros ingresos» que, no obstante, no fueron suficientes para compensar descensos en los ingresos del negocio móvil y del fijo empresarial.