Sin stock

Cuenta atrás para el inicio de la escasez generalizada por la huelga

El paro de transportistas deja ya pérdidas de 650 millones en el sector de la alimentación. El problema de desabastecimiento se extiende a la industria, construcción y hostelería

Estantes sin leche, aceite de girasol, algunas verduras, pescado, hortalizas, harina ni arroz. Estos están siendo los primeros estragos palpables por los consumidores del paro de transportistas que hoy cierra su quinta jornada, pero el sector alimentario alerta: en «las próximas horas» comenzarán los problemas de abastecimiento generalizados y ganaderos, agricultores, industria y distribución alimentaria se enfrentan a pérdidas millonarias que pondrán en riesgo 100.000 puestos de trabajo.

Los piquetes violentos que han derivado en detenciones, el incumplimiento de los servicios mínimos y las marchas lentas de camiones durante toda esta semana han colocado a granjas y fábricas al borde del colapso. De hecho, muchas de ellas han tenido que paralizar su actividad ante la ausencia de materias primas, envases y la imposibilidad de dar salida a los productos terminados. Derivado de esta situación, las empresas de distribución tendrán que asumir unos sobrecostes de en torno a los 130 millones de euros diarios para poder transportar y redistribuir alimentos a los puntos de venta.

Las pérdidas en la cadena alimentaria por la primera semana del paro convocado por la Plataforma en Defensa del Sector del Transporte de Mercancías por Carretera ascienden a 650 millones, según estiman las patronales del sector del consumo (Cooperativas Agroalimentarias, FIAB, Aecoc, Asedas, ACES y Anged) en el que alerta de los estragos de este paro en Andalucía, Galicia, zona norte del país, Extremadura y Levante. La situación, además, pone en riesgo 100.000 puestos de trabajo y está perjudicando especialmente a sectores igualmente afectados por la inflación y la pandemia, como la hostelería.

La patronal Hostelería de España apunta que la huelga ya se nota en bares y restaurantes y, en la misma línea, el director general de Cerveceros de España, Jacobo Olalla, exige «contundencia» para evitar acciones violentas en las carreteras que puede conllevar a la falta de suministro en bares y restaurantes, donde las cervezas suponen entre el 25 y el 40 % de la factura en bebidas. También la patronal de la restauración colectiva –que atiende en los comedores de colegios y hospitales– ha alertado de su posible «paralización» si se mantiene la huelga.

La situación de las industrias que trabajan con productos perecederos como la leche o la carne es especialmente grave, denuncian la Asociación Nacional de Industrias de la Carne de España (Anice) y la Organización Interprofesional Láctea (Inlac), ya que se están echando a perder miles de toneladas de alimentos que no salen de las granjas y que también se quedan atrapados en las fábricas ya producidos al no poder ser distribuidos a los puntos de venta. Igualmente, los pescadores han advertido de que la huelga está provocando «gravísimos perjuicios», con la pérdida de cientos de toneladas de pescado en la de altura y el amarre de numerosas flotas en el caso de la bajura, ante la imposibilidad de comercializar sus capturas.

Sin stock de leche

La estampa es similar en todos los supermercados. Falta leche, aceite de girasol, harina, arroz y hortalizas. No saben cuándo podrán reponer estos productos y algunos supermercados de Madrid explican a LA RAZÓN que su stock de leche se ha acabado este viernes, por lo que el fin de semana los clientes se toparán con un desabastecimiento aún mayor. Las zonas más afectadas, según Asedas, Anged y Provacuno son Andalucía, Galicia, Asturias y Castilla-La Mancha, de donde proceden verduras, leche, marisco y carne.

En esta línea, el impacto de la huelga se ha dejado notar de manera desigual en los diferentes mercados del país. En el caso de Mercamadrid, el principal hub alimentario de España, ha recibido el 61% de la mercancía habitual por la huelga y sigue sin poder reexpedir producto, por lo que el aprovisionamiento se está viendo más afectado en otras provincias. En MercaBarna, sin embargo, la llegada de productos se ha reducido en torno a un 33%. Aunque las mercancías están llegando en mayor medida desde que el Ministerio de Interior desplegó el dispositivo de seguridad formado por 23.600 agentes de la Policía Nacional y la Guardia Civil, la duración del paro está asfixiando a todos tipo de sectores.

La Alianza por la Competitividad de la Industria Española, constituida por Anfac (automoción), AOP (refino), Aspapel (papel), Feique (química y farmacia), FIAB (alimentación y bebidas), Oficemen (cemento) y Unesid (siderurgia), también ha comunicado que los graves problemas para mantener la actividad industrial y la libre circulación de mercancías se han traducido en costosas paradas de fábricas. Esta crisis también se extiende al sector de la construcción y el hormigón, que piden medidas urgentes para evitar parones y ERTE.