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Cepsa invertirá 8.000 millones de euros la próxima década para completar su transición energética

La compañía aspira a convertirse en líder de la movilidad y la energía sostenibles en España y Portugal

El consejero delegado de Cepsa, Maarten Wetselaar, durante la presentación del plan
El consejero delegado de Cepsa, Maarten Wetselaar, durante la presentación del planJuan Olivares

Cepsaha presentado hoy su nueva Estrategia 2030, denominada “Positive Motion”, con la que aspira a convertirse en líder de la movilidad y la energía sostenibles en España y Portugal, y ser un referente de la transición energética. Para ello, la compañía ha asegurado que se transformará en “una empresa más enfocada a las necesidades de sus clientes, que también afrontan sus propios desafíos en la descarbonización de sus actividades”. Para lograrlo, la compañía invertirá en esta década entre 7.000 y 8.000 millones de euros, de los cuales, un 60% se destinará a negocios sostenibles a partir de 2023. Todo ello, según Cepsa, se traducirá en una mayor contribución de los negocios sostenibles a su beneficio bruto (Ebitda), pasando del 14% en 2022 a más de la mitad en 2030. El plan se autofinanciará en su mayor parte con los ingresos que genera la compañía, según ha explicado durante su presentación Maarten Wetselaar, consejero delegado de Cepsa.

La compañía ha establecido una ambiciosa hoja de ruta para recortar sus emisiones y situarse entre las compañías referentes de su sector. En concreto, en 2030 reducirá sus emisiones de CO2 (alcance 1 y 2) en un 55% respecto a 2019, y aspira a alcanzar cero emisiones netas en 2050 e ir más allá, contribuyendo positivamente (Net Positive). En cuanto al alcance 3, la intensidad de carbono de sus productos se reducirá entre un 15% y un 20% en 2030.

Nuevos ecosistemas

La nueva visión de negocio de la compañía estará formada por dos ecosistemas: movilidad sostenible y “new commerce”, y energía sostenible. Todo ello alimentado por los Energy Parks y las alianzas con otros socios estratégicos.

En la nueva estrategia de Cepsa, la descarbonización del transporte por carretera y la movilidad del cliente final tendrán un papel fundamental. La compañía afirma que desarrollaráel mayor ecosistema de movilidad eléctrica en España y Portugal, junto a Endesa, desarrollando la más amplia red de recarga ultrarrápida en carretera, que alcanzará una ratio mínima de un cargador de 150 kW cada 200 kilómetros en las principales carreteras y vías interurbanas y que se empezará a desplegar en el segundo trimestre del año. Asimismo, impulsará la demanda de hidrógeno verde en el transporte por carretera, para lo que se ha fijado la meta de establecer en 2030 una estación de repostaje cada 300 kilómetros, en los corredores que conectan España con Europa. Cepsa convertirá sus estaciones de servicio, la segunda mayor red de España y Portugal, se transformarán en espacios digitalizados que ofrecerán una amplia variedad de servicios de ultraconveniencia y restauración, que incluirán alimentos frescos, parafarmacia, comercio electrónico, puntos de recogida de paquetería y servicio de lavado sostenible de vehículos, así como soluciones multienergía para el repostaje en carretera. Además, creará una cultura impulsada por los datos, utilizando analítica avanzada para transformar la experiencia de cliente e impulsar su programa de fidelización. Y, según asegura, a través de la toma de decisiones basada en la inteligencia artificial, la compañía será capaz de ofrecer servicios integrales en tiempo real.

Grandes clientes

El segundo gran ecosistema de la nueva estrategia de Cepsa se centrará en acelerar la descarbonización de los clientes industriales, el transporte aéreo y marítimo, así como de la propia compañía, a través de la producción de moléculas verdes, principalmente hidrógeno renovable y biocombustibles. Cepsa, que actualmente es uno de los principales productores españoles de hidrógeno, afirma que liderará en 2030 la producción de hidrógeno verde en España y Portugal, con una capacidad de 2 GW. De este modo, “se convertirá en un referente en la importación y exportación de esta energía al continente europeo, África y Oriente Medio, gracias a la localización privilegiada de sus instalaciones en la Península Ibérica”, ha explicado. Paralelamente, también asegura que liderará la producción de biocombustibles de segunda generación, con una producción de 2,5 millones de toneladas al año en 2030, fomentando así la economía circular. En este ámbito, Cepsa asegura que se convertirá en “un proveedor de referencia de combustible sostenible para la aviación (SAF)”, con una producción anual de 800.000 de toneladas. La compañía representa a día de hoy el 35% del mercado de suministro energético para el sector aéreo en España.

Para llevar a cabo esta nueva estrategia, Cepsa apostará por convertir sus refinerías en parques energéticos diversificados y sostenibles. La compañía cree que estas instalaciones están estratégicamente situadas en el sur de Europa, junto a los principales puertos, lo que proporciona a los grandes clientes industriales un acceso privilegiado a los mercados clave. Asimismo, la compañía implementará tecnologías basadas en la inteligencia artificial y analítica avanzada para optimizar sus procesos y reducir el impacto ambiental de la actividad de sus centros industriales.

Wetselaar cree que España tiene una oportunidad “histórica” en renovables

En el ámbito de las energías renovables, Cepsa desarrollará una cartera de proyectos de energía solar y eólica para su propio consumo, con una capacidad de 7 GW, de los cuáles 1,5 GW ya tienen conexión a la red. Su estrategia de los negocios de Química y Exploración y Producción permanece sin cambios. Wetselaar ha explicado que la producción de energía renovable para terceros “no va a ser uno de los hilos estratégicos principales de la compañía”. “Algunos clientes quieren paquetes completos [con energía de origen renovable] y se los vamos a dar. Pero no vamos a invertir grandes cantidades para vender energía renovable”, ha asegurado.

El consejero delegado de la energética ha destacado que “la estrategia que presentamos hoy es un plan a largo plazo que refleja la oportunidad histórica que tienen España y sus empresas energéticas para convertirse en actores clave en la promoción y producción de energías limpias. Esto ayudará a reforzar la seguridad e independencia energéticas de Europa, y confío en que Cepsa pueda asumir un papel de liderazgo en este proceso”.