Arranca la atención presencial para la Renta

La Agencia Tributaria empezará a atender el próximo miércoles 1 de junio a los contribuyentes en sus oficinas de forma presencial para la confección y presentación de los documentos correspondientes a la declaración de la renta 2021. Desde el pasado jueves 26 de mayo, los contribuyentes tienen la posibilidad de solicitar su cita previa para esta atención presencial que comenzará la semana entrante.

Además de esta vía y de la presentación por internet a través de la página de la agencia y de la aplicación móvil, los contribuyentes menos habituados a las nuevas tecnologías que requieran asistencia personalizada tienen también este año a su disposición desde principios de mayo el plan ‘Le Llamamos’, una alternativa a la asistencia presencial en oficinas.

El plazo de presentación finalizará el 30 de junio para declaraciones tanto a ingresar como a devolver, si bien el plazo en las declaraciones a ingresar con domiciliación bancaria concluirá el 27 de junio. Según los datos más recientes de la Agencia Tributaria, ya se han presentado más de 11 millones de declaraciones desde que la campaña arrancó el pasado 6 de abril, más de la mitad del total previsto.

11.122 millones a devolver y 13.400 a ingresar

Y es que en el conjunto de la campaña está prevista la presentación de 21.921.000 declaraciones, un 0,9% más que el año pasado, y de ese total se espera que 14.350.000 den derecho a devolución (dos tercios del total y un 1,1% más que el año anterior) por un importe estimado de 11.122 millones de euros (5,8% más). También se prevén 5.971.000 declaraciones a ingresar (un 1,5% menos), por importe de 13.400 millones de euros.

Con carácter general, los contribuyentes tienen que presentar declaración por IRPF cuando sus rendimientos del trabajo superan los 22.000 euros. Ahora bien, cuando cuentan con dos o más pagadores -sería el caso de un empleador y del SEPE-, ese límite se reduce a 14.000 euros si el importe percibido por el segundo y restantes pagadores supera los 1.500 euros.

Al igual que el año pasado, los perceptores del ingreso mínimo vital y los miembros de la unidad de convivencia están obligados a presentar la declaración. Además, buena parte de los trabajadores que hayan estado en ERTE y ganen menos de 22.000 euros anuales tendrán que presentar la declaración, salvo que no superen los 14.000 euros en total.