Energía

¿Qué es la “excepción ibérica” y cuánto puede abaratar la luz?

Los consumidores españoles deberán asumir al menos 5.500 millones de costes para rebajar el precio del gas “eléctrico” durante un año

La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera
La vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa RiberaAlberto OrtegaEuropa Press

El tope del precio al gas natural para generación eléctrica en función de la denominada “excepción ibérica”, mediante la que se pretende desligar los precios de esta materia prima de la volatilidad de los mercados, entrará “plenamente” en vigor el 15 de junio, tras la subasta del día previo en la que se aplicarán por primera vez las medidas. Esta excepcionalidad es doble: primero por la escasa interconexión con el resto de Europa (a través de Francia), la muy reducida dependencia del gas ruso, al contrario que el resto del Continente, y, segundo, porque se trata de una medida transitoria.

España y Portugal anunciaron a finales de abril que habían llegado a un acuerdo político con la Comisión Europea para limitar en el mercado mayorista de la electricidad en España y Portugal el precio del gas utilizado por las centrales de ciclo combinado para producir luz, y así aliviar la factura de los consumidores. La idea, tras darle varias vueltas, es que ese tope abarque doce meses y empiece con un precio medio del gas de 40 euros el megavatio hora para estabilizarse en unos 48,75 euros MWh de media en todo el periodo, según lo aprobado por Bruselas.

¿Cuánto nos ahorraremos?

No está claro. A mediados de mayo, el Gobierno estimaba que el tope del gas permitiría rebajar un 40% los precios del mercado mayorista, hasta los 130 euros MWh. Luego se reconocía que había que sumar 45 euros MWh de compensación del sistema, con lo que la rebaja se quedaba en el 15%. Algunos directivos del sector, el último el presidente de Bahía Bizkaia Gas, Díez de Ulzurrun, creen que apenas tendrá impacto en los consumidores, ni en los hogares ni en las industrias.

Finalmente, de acuerdo a las tablas que ha manejado Bruselas para aprobar el tope al gas, con un precio medio tope de 48,75 euros MWh, el precio de la luz en el ‘pool’ eléctrico se situaría en 126 euros MWh sin incluir la compensación a las plantas y en 174,4 euros MWh teniendo en cuenta esta “contribución” de ajuste, como la denomina Bruselas.

El Gobierno valoraba una ventaja del 37% para el mercado doméstico y del 70% para los industriales, con un ahorro promedio de unos 80 euros el megavatio hora respecto al precio medio del primer trimestre del año en curso. Así lo ha explicó el pasado viernes 13 de mayo la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, en su comparecencia al término del Consejo de Ministros en el que se ha aprobaba el mecanismo.

¿Cómo funciona?

El tope arranca en 40 euros MWh e irá creciendo cinco euros al mes desde el séptimo hasta los 70 euros MWh para converger hacia los precios del mercado cuando concluya tras los 12 meses. Por tanto, en el arranque, el ahorro será inferior a la media. Es decir, en la primera factura de julio podría ser del 12,5% para los hogares y de entre el 18-20% para los industriales. Incidirá en primer lugar en los clientes del mercado regulado PVPC. Los contratos fijos inferiores a un año se irán incorporando progresivamente”, cuando corresponda la actualización de sus precios.

¿Lo pagaremos de otra forma?

El precio de topar el gas para generación eléctrica por debajo de los costes reales supondrá 6.300 millones para España y 2.100 millones para Portugal. El grueso de esos 6.300 millones con los que se subvencionará a las eléctricas por la intervención del mercado de forma temporal lo pagarán los consumidores. ¿Cuánto? El ajuste promedio durante los doce meses de vigencia de este mecanismo es de 47,86 euros MWh. Según los cálculos, 6 euros provendrán de las rentas de congestión (un 12,6% de dicho coste) mientras que el resto correrá a cargo de los consumidores (un 87,4 s% o 41,84 euros). En definitiva, los consumidores asumirán 5.500 millones de esta medida.