La deuda pública baja ligeramente en abril, un 4% tras el récord histórico de marzo

Mínimo respiro para las arcas públicas en abril. La deuda de las Administraciones Públicas bajó levemente al alcanzar los 1,445 billones de euros, 8.427 millones menos que en el mes de marzo, cuando alcanzó la cifra récord histórica de 1,453 billones. Eso no evita que los números rojos se hayan incrementado en 55.761 millones de euros durante el último año, lo que representa un repunte del 4%.

Según los datos publicados por el Banco de España, la mayor parte de la reducción de esta deuda corresponde al Estado, que la redujo en 10.041 millones respecto a mes anterior, para quedarse en con 1,264 billones, un 0,9% menos respecto al mes anterior pero un 5,1% más frente al dato del año pasado. De esta manera se rompe así la tendencia alcista que venía registrando desde hace meses y que solo se detuvo en el mes de septiembre del año pasado, cuando se redujo en más de 10.000 millones. Desde entonces, por la influencia de nuevas olas de la pandemia y el remate de la guerra en Ucrania han forzado al Ejecutivo asumir un esfuerzo extra de gasto para afrontar medidas de contención ante la crisis, forzados por una galopante inflación.

No siguieron el mismo camino la comunidades autónomas, que volvieron a cerrar en negativo un mes más y acumulan un agujero de 310.655 millones, 914 millones más que en marzo. Eso es un incremento del 0,3% mensual y una ligera bajada del 0,1% interanual. Por contra, las corporaciones locales siguen su línea descendente y ya deben nueve millones menos, para totalizar 22.455 millones de deuda, lo que corresponde a un 0,04% respecto al mes anterior, si bien bajó un 1,1% frente al mismo mes del año pasado.

En el caso de la Seguridad Social se mantiene estancada como en el mes anterior y apenas bajó dos millones, para cerrar con un saldo negativo de 99.185 millones, un 16,2% respecto al mismo mes del año pasado. Su delicada situación financiera que no ha hecho más que empeorar desde que Pedro Sánchez inició en 2019 esta legislatura. Ese año, la deuda consolidada de la Seguridad Social cerró el ejercicio en 55.024 millones, tras aumentar el pasivo en casi 14.000 millones. En 2020, el año de la pandemia, los números rojos engordaron hasta casi los 30.000 millones, para sumar 85.355 millones. Y el año pasado pasivo sumó casi 12.000 millones más. En total, casi 56.000 millones más que sumar al agujero de la Seguridad Social en poco más de tres años.

La deuda global también moderó su peso respecto al PIB al 117,7%, siete décimas por debajo del cierre de 2021 (118,4%) gracias a la mayor actividad económica y 2,5 puntos por encima del objetivo del Gobierno para todo el año (115,2%) en el Plan de Estabilidad remitido a Bruselas a finales de abril, en el que planteó un progresivo descenso del déficit a lo largo de los cuatro ejercicios hasta que la ratio deuda/PIB se haya situado en el 109,7% en 2025.

Al cierre de abril la mayor parte de la deuda pública se concentraba en valores representativos (1.250.070 millones), mientras que el resto se repartía en préstamos (190.333 millones) y efectivo y depósitos (5.023 millones). Al cierre de abril la mayor parte de la deuda pública se concentraba en valores representativos (1.250.070 millones), mientras que el resto se repartía en préstamos (190.333 millones) y efectivo y depósitos (5.023 millones).