Economía

Calviño avisa: “Los próximos meses van a ser complejos” para familias y empresas

La ministra económica volverá a pedir el miércoles a los agentes sociales un pacto de rentas para no desbocar más la “la inflación persistente y elevada”. Escrivá niega que vaya a haber recesión y Sánchez prefiere presumir de datos del paro: “Son formidables”

Pocos dudan ya de que los próximos meses van a durísimos para la mayoría de las familias españolas. Así lo ha reconocido la ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, que advierte sin tapujos que los próximos trimestres “van a ser complejos y complicados” ante un escenario de inflación “más persistente y elevado” de la previsto. Por ello, se ha reunido hoy con el Consejo Asesor de Economía para analizar la coyuntura económica actual en un contexto marcado por la guerra en Ucrania y ha convocado otra reunión este miércoles con los agentes sociales para volver a abordar el pacto de rentas.

El análisis de los datos macroeconómicos ya reflejan el impacto del conflicto bélico, así como la intensa escalada de precios, que sitúa la inflación en niveles máximos desde hace casi 40 años. Según los datos avanzados publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), el Índice de Precios de Consumo (IPC) disparó su tasa interanual en junio hasta el 10,2%, su nivel más alto desde abril de 1985.

“Tenemos que prepararnos y trabajar con un escenario de inflación más persistente y elevada, en el que los próximos trimestres van a ser complejos” para empresas y familias, ha advertido la titular económica del Gobierno en declaraciones a los medios tras la octava reunión del Consejo Asesor. Pese a ello ha negado la posibilidad de que en los próximos trimestres la evolución del PIB sea negativa.

El cuadro macroeconómico del Gobierno establece un crecimiento económico para 2022 del 4,3%, con la previsión de que la recuperación de los niveles prepandemia llegará en el primer trimestre de 2023. Sin embargo, el comienzo de año para la economía española ha mostrado los primeros síntomas de parón económico tras el frenazo experimentado por el consumo de los hogares. Según los últimos datos de Contabilidad Nacional publicados por el INE, el PIB desaceleró su crecimiento trimestral dos puntos entre enero y marzo, hasta situarlo en el 0,2%, una décima menos de lo esperado. Esto, sumado a las incertidumbres por la guerra, ha provocado que diferentes organismos nacionales e internacionales hayan recortado ya sus previsiones de crecimiento del PIB español.

Ante este escenario, Calviño ha remarcado la “importancia y conveniencia” de que los agentes sociales puedan acordar un pacto de rentas para proporcionar “confianza y estabilidad” a los trabajadores, empresas y el conjunto de la sociedad. Eso es lo que les pedirá en la reunión del miércoles, en un gesto que intenta encauzar el diálogo entre empresas y sindicatos en el acuerdo bilateral que marca el Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC), roto por las cláusulas de revisión salarial, línea roja de los sindicatos y que rechazan de plano los empresarios en la situación actual.

Calviño también ha reconocido que, junto a la energía, hay una creciente preocupación por parte de los expertos en cuanto a la subida de precios de los alimentos. “La guerra nos hace a todos más pobres y es muy importante garantizar un reparto justo de su coste”, por lo que ha vuelto a defender las medidas del Gobierno, que “están permitiendo contener la inflación en 3,5 puntos porcentuales”, aseguró.

Por su parte, José Luis Escrivá, ministro de Seguridad Social, ha negado que se vaya a producir un periodo de recesión en España, ni por la cronificación del conflicto en Ucrania y ni por la elevada inflación, aunque al menos sí ha admitido que podría producirse un escenario de desaceleración. En declaraciones a La Sexta sobre si España se encuentra cerca de una recesión, Escrivá se ha mostrado tajante: “En España, no, porque el punto de partida es muy sólido por el efecto del plan de recuperación, los buenos datos del mercado laboral y la situación financiera general de empresas y familias”, que gozan de un gran embalsamiento de ahorro.

El titular de Seguridad Social también ha valorado los datos de desempleo y afiliación conocidos este lunes, los cuales ha calificado de “francamente buenos” pese a que la situación internacional es “complicada”. Los datos “demuestran que los planes de inversión y contratación de las empresas son positivos (...) la inflación no afecta a los planteamientos a medio plazo de las empresas”.

Aún mucho más satisfecho se mostró el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, con estos datos, que ha calificado como “formidables”, teniendo en cuenta un complicado contexto, con una elevada inflación y “con la crisis económica a las puertas de Europa a causa de la guerra”. Según defendió, “me parece clave demostrar con datos que la solidaridad y la justicia social son dos palabras de la política económica para responder a la crisis de forma eficaz pero también equitativa”. El presidente tiró de cifras para recordar que en la anterior crisis financiera se destruyeron tres millones de puestos de trabajo y se tardó 144 meses en recuperar los niveles empleo previos crisis financiera, “cuando ahora en cambio se ha conseguido en 18 meses”.