Bienvenido Mr. Marshall: España ya no importa una gota de petróleo ruso y lo sustituye por el americano

España ya no compra una sola gota de petróleo a Rusia. Por contra, las cada vez mayores importaciones de crudo tienen un gran beneficiado: Estados Unidos, convertido en el mayor proveedor nacional con un crecimiento meteórico. Todo en un contexto en el que la compra de crudo se disparó en mayo un 25,5% respecto al mismo mes de 2021, por encima del rango de los últimos cinco años para ese mismo mes, según los datos publicados por la Corporación de Reservas Estratégicas (Cores). Los datos acumulados de los cinco primeros meses del año indican que las importaciones de crudo se incrementaron un 20% con respecto al mismo periodo de 2021, cuando todavía persistían algunas restricciones por la pandemia, a tenor de los registros del organismo que contribuye a garantizar la seguridad del suministro de hidrocarburos.

EE UU triplica sus ventas

España importó en mayo crudo de 41 países, con Estados Unidos –962.000 toneladas– representando el 16% del total y consolidando a este país como principal suministrador de crudo, triplicando (233%) sus importaciones respecto al mismo mes del año pasado y registrando las más altas desde que se dispone de datos.

Rusia desaparece

A continuación se situó Nigeria, con 773.000 toneladas que representaron el 12,9% de todas las importaciones, pese a que estas cayeron levemente, un 0,4% respecto a mayo de 2021. En tercer lugar se situaron las importaciones de Irak, que se duplicaron (123,3%) hasta alcanzar las 749.000 toneladas, que suponen el 12,5% de todo el crudo importado en mayo, mes en el que no se registró ninguna importación de petróleo a España procedente de Rusia, que en los cinco primeros meses de 2022 (698.000 toneladas) descendieron un 45% frente al mismo periodo de 2021, ocupando el décimo tercer puesto entre los importadores de crudo a España en ese periodo.