Energía

Foment pide el cambio de sistema de precios del gas y rechaza los impuestos extraordinarios

Propone “eliminar el TTF como sistema de referencia para fijar el precio del gas natural en los mercados europeos” porque no responde a un equilibrio oferta-demanda

El presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez Llibre
El presidente de Foment del Treball, Josep Sánchez LlibreFOMENT DEL TREBALLFOMENT DEL TREBALL

Foment del Treball ha reclamado a las autoridades europeas un cambio del sistema de fijación de precios del gas natural en los mercados internacionales, eliminando el actual TTF, y rechaza aplicar un impuesto extraordinario a la facturación de las compañías. La patronal catalana reflexiona en un comunicado que la industria y los consumidores asumen una fuerte subida de precios del gas natural, que considera consecuencia de un fuerte aumento de la demanda de GNL (gas natural licuado) para sustituir el gas ruso y por el aumento adicional del precio del GNL mundial.

El principal índice de referencia para la formación de precios en Europa del GNL es la cotización del TTF (Title Transfer Facility) holandés, un sistema de compraventa de gas al por mayor que facilita la determinación de precios de esta materia prima y que, actualmente, cotiza muy por encima del precio internacional de GNL, hasta 100 euros/MWh (un 75 % más). Este diferencial no actúa sobre la oferta de GNL en el centro de Europa, ya que las infraestructuras de transporte están saturadas y no es posible introducir más gas, por tanto, al final, este precio solo sirve para destruir demanda interna en el centro de Europa.

Por tanto, Foment considera que “no tiene sentido que los precios en los países que no tienen problemas de suministro estén fijados por un precio, cuyo objetivo es destruir la demanda interna de unos países”. Por ello, la patronal catalana cree que los gobiernos europeos y la UE deben tomar “medidas coyunturales para abaratar el precio del gas y frenar la especulación”.

Proponen “eliminar el TTF como sistema de referencia para fijar el precio del gas natural en los mercados europeos” porque, argumenta Foment, solo representa una parte del mercado mundial del gas y no responde a un equilibrio oferta-demanda, afectando así a la competitividad de las empresas. Entre otras medidas coyunturales pide excluir de la formación de precios las rentas de congestión de las infraestructuras del centro de Europa, incorporando un “price cap” que la elimine. Este “price cap” (mecanismo de fijación de precios máximos que permite establecer límites máximos de variación) se debería fijar en referencia a un mercado líquido y representativo del precio mundial para evitar la falta de suministro y, por tanto, racionamiento, que provocaría un “price cap” artificialmente bajo.

Foment también advierte sobre la necesidad de evitar afectación sobre los derivados financieros ya cerrados y señala que en el TTF se negocian más de diez veces la demanda de gas europea. La patronal considera negativa la propuesta del Gobierno español de establecer un impuesto extraordinario a las compañías energéticas porque, a su juicio, la propuesta de PSOE y Podemos “no es un impuesto como tal y, por tanto, se pierde la seguridad jurídica del régimen fiscal. La propuesta no grava beneficios, sino volumen de facturación y no grava un incremento, sino el valor absoluto”.

A su juicio, el proyecto del nuevo impuesto se debería tramitar como proyecto de ley, lo que permitiría disponer de memorias de impacto normativo y económico, así como de un informe del Consejo de Estado que permitiría disponer de más información a los legisladores.

Foment sí valora otras medidas, aunque cree que se han adoptado tarde, como la reducción del IVA sobre el gas del 21% al 5% y la decisión de aplicar la excepción ibérica a las industrias que funcionan en cogeneración y a las que el perjudicó el alto precio del gas, hasta el extremo de que 400, el 60 % del total, detuvieron la producción con este sistema.