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Coche eléctrico: ventajas frente a los carburantes y cómo ahorrar

Las ventas del coche eléctrico se han incrementado un 100% en los seis primeros meses de 2022 frente al año previo

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El precio de los carburantes se ha encarecido notablemente en los últimos meses en España, cuyo coste se mantiene actualmente entorno a los 1,8 euros el litro, siendo la gasolina un 13% más cara que hace un año y el diésel un 25% más. Por tanto, llenar el depósito del vehículo supone un gran esfuerzo económico para la mayoría de conductores, haciendo que se planteen alternativas que les hagan ahorrar como el cambiarse al coche eléctrico.

No obstante, pese a que España no lidera el desarrollo de la movilidad eléctrica, poco a poco más personas deciden apostar por este tipo de vehículos. En este sentido, uno de cada diez coches que se han vendido en el país este año es eléctrico, lo que supone un aumento en ventas del 100% en los seis primeros meses de 2022 frente al año previo, según datos de la empresa de seguros online, Cleverea.

“El coche eléctrico ya no es el futuro; es el presente. Nos dirigimos hacia una conducción más sostenible, más ecológica y limpia, y muchos conductores ya han dado el paso”, explica el Consejero Delegado de Cleverea, Javier Bosch.

Por tanto, el atractivo de estos vehículos eléctricos se ha incrementado tras la subida del precio de carburantes, haciendo que sus ventas no dejen de crecer. Sin embargo, existen otra serie de ventajas para elegir un coche eléctrico:

  • Escaso impacto medioambiental: Tras la eliminación de los carburantes, esto implica no tan solo un ahorro al llenar el depósito, sino también una conducción “limpia y respetuosa” con el medio ambiente.
  • Mayor facilidades de circulación y aparcamiento: Las grandes ciudades del país están restringiendo la presencia de coches de gasolina y diésel poniéndoles trabas para circular y estacionar. No obstante, aquellos coches cero emisiones tienen ventajas como aparcamiento gratuito en zonas verdes o azules en algunos casos o incluso estar exentos de las restricciones movilidad cuando hay altos niveles de contaminación.
  • Ayudas a la compra: Estos vehículos tienen un precio más elevado que aquellos que se mueven con combustibles fósiles. Sin embargo, existen una serie de ayudas para fomentar su compra, como por ejemplo el Plan Moves III (vigente hasta finales de 2023) que ofrece una subvención de hasta 7.000 euros para adquirir un coche eléctrico no más caro de 45.000 euros a cambio de uno viejo o 4.500 sin la entrega de este último. Si es un híbrido enchufable, la ayuda será de 5.000 euros si se entrega uno viejo (de siete años o más) y de 2.500 si no se hace. Asimismo existen subvenciones para cubrir otros costes como en la instalación de un punto de recarga, suponiendo hasta el 80% del total.
  • Ventajas fiscales: Al emitir menos de 120 gramos de CO2 por km, estos coches están exentos del impuesto de matriculación o incluso hasta el 75% de rebaja en el impuesto municipal de circulación en algunas ciudades, cuyo porcentaje es incluso más alta en otras.
  • Conducción silenciosa: Estos vehículos además de reducir la contaminación medioambiental, también lo hacen con la acústica, ya que son prácticamente silenciosos.
  • Mayor capacidad de aceleración: Los coches que funcionan con batería arrancan con más fuerza. Estos tienen la mayor potencia que los de diésel o gasolina ya que alcanzan la velocidad deseada más rápidamente, en vez de subir de forma gradual.

¿Cómo puede ahorrar un conductor de coche eléctrico?

  • Analizar la tarifa de la luz: Si se tienela opción de cargar el automóvil en casa, los conductores de estos vehículos pueden aprovechar las subvenciones para hacer esta instalación, controlando así el coste de cada recarga. Los usuarios del mercado regulado deberán conocer los horarios más baratos y caros para saber cuando cargar su vehículo.
  • Planificar la ruta: Saber los kilómetros que se van a realizar será de gran ayuda ya que estos conductores podrán utilizar los mejores momentos del día o incluso los puntos de recarga más baratos.
  • Saber aprovechar la recarga pública: Actualmente, hay unos 15.000 puntos de recarga públicos en España, y aunque algunos de ellos tienen un precio bastante elevado, otros son muy baratos o gratuitos, los cuales se localizan en algunos centros comerciales, hoteles o incluso centros de trabajo.
  • Tener en cuenta la autonomía: La autonomía es un requisito básico a la hora de elegir un modelo u otro, ya que tener más kilómetros de movimiento sin tener que recargar aporta una mayor libertad al conductor, pudiendo ir más lejos de viaje o a un punto de recgaro más barato.