¿Cómo funciona el renting de coches en España?

El mercado del automóvil lleva años enfrentándose a una profunda transformación, ya que la movilidad y hábitos de consumo de la mayoría de personas ha cambiado. En este sentido, en el acumulado del año hasta octubre, las entregas de automóviles en el mercado español alcanzaron un volumen de 666.247 unidades, un 5,8% menos respecto a las 706.997 unidades que se contabilizaron un año antes. No obstante, pese a que las ventas de coches en el país han continuado desplomándose, el “renting” se ha convertido en uno de los sectores con mayor crecimiento en el mundo de la automoción, ya que ha sabido adaptarse a la nueva movilidad. Tanto es así, que el “renting” ha cerrado el tercer trimestre de 2022 con un peso del 26,08% en el mercado, un 1,27% más que en el mismo periodo del año pasado.

¿Qué es el renting?

En términos generales, el “renting” es la opción de alquilar un coche a largo plazo durante el cual se puede disfrutar de un vehículo pagando una cuota mensual -que incluye una serie de gastos para su buen funcionamiento- que dependerá del modelo elegido, del kilometraje que se realizará y de los servicios que se desean. Por tanto, quien se acoge al “renting”, no es propietario del vehículo, sino el inquilino del automóvil durante el período pactado en el contrato, por lo que no deberá preocuparse de ningún gasto referido a la gestión o mantenimiento del coche, aunque si que será el responsable de pagar la gasolina, las posibles multas, la limpieza del coche e incluso aquellas reparaciones de daños que puedan originarse por un mal uso del coche.

¿Qué te incluye un renting?

La persona que se acoge al “renting” deberá firmar un contrato con la empresa a la que pertenece el coche para poder hacer uso de este vehículo durante un tiempo determinado. Es por ello, que antes de nada, la persona interesada en esta opción tendrá que revisar el acuerdo para saber las condiciones del “renting” y qué incluye la cuota mensual. En este contexto, como norma general, se suelen incluir las siguientes condiciones típicas en la mayoría de “rentings”:

• Labores administrativas como la compra del vehículo, su matriculación y el transporte desde la fábrica hasta la entrega al cliente.
• Mantenimiento preventivo mecánico completo del vehículo, con las correspondientes revisiones establecidas por cada marca, así como algunas adicionales.
• Reparación mecánica del coche en caso de avería. Asimismo, en estos casos así como si se produce un accidente, este contrato suele incluir un vehículo de sustitución hasta que terminen de reparar el coche de “renting”.
• Servicio de reclamación de multas hasta agotar la vía administrativa.
• Cambio de neumáticos, tanto el coste de las ruedas como la mano de obra, según los plazos establecidos en el contrato.
• Seguro completo a todo riesgo sin franquicia contra siniestros y robo del vehículo, aunque este puede tener eneros coberturas dependiendo de con quién se contrate el “renting”.
• Servicio de asistencia en carretera.