Por qué no debería tener más potencia eléctrica de la contratada

El precio de la luz ha disparado la factura eléctrica mensual de miles de consumidores en España en los últimos meses, haciendo que muchas familias hayan tenido que invertir una mayor parte de sus ingresos para hacer frente a los altos recibos. Tanto es así, que en el acumulado de los once primeros meses de 2022, la factura anual de la luz se ha situado en los 1.027,09 euros, lo que supone unos 304 euros másque en el mismo periodo del año anterior, cuando ascendía a los 723,31 euros.

En este sentido, son muchos los factores que pueden influir en el coste de la factura de la luz como la potencia eléctrica que se tenga contratada o incluso el consumo de energía que se haga.

La potencia eléctrica determina la cantidad de aparatos eléctricos que se pueden conectar a la red simultáneamente. Es por ello que a la hora de contratar una tarifa u otra, se debe elegir una potencia que se ajuste a las necesidades de los usuarios.

“Contratar la potencia eléctrica necesaria puede ayudar al usuario a pagar menos en sus facturas cada mes y evitará posibles cortes momentáneos de luz por sobrepasar la potencia contratada”, explican desde la empresa especializada en la comparación de tarifas de energía, Selecra.

No obstante, más de un 70% de hogares tiene más potencia contratada de la necesaria: un 69,7% en hora punta y un 74,6% en hora valle, según los últimos datos del Panel de Hogares de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC).

En este contexto, si se tiene contratada una potencia eléctrica superior a la que realmente se necesita, lo que ocurrirá es que se pagará más en la factura de la luz por el término fijo o de potencia.

Los consumidores están mejor informados

Pese a que la mayoría de los consumidores no tienen una potencia que se ajusta a sus necesidades, los datos del CNMC muestran una mejora del conocimiento que tienen los hogares sobre los tipos de suministro de energía.

En lo que respecta a la luz, el grado de conocimiento de los hogares respecto a las diferencias entre mercado libre y mercado regulado (PVPC) ha aumentado más de 10 puntos en un año, pasando de un 30,5% en el segundo trimestre de 2021 a un 42,6% en el mismo periodo de 2022. En cambio, en lo que a gas natural se refiere, el grado de conocimiento entre el mercado liberalizado y en el mercado regulado (TUR) también ha crecido aunque en un menor grado, pasando de un 22,7% a un 30%.