¿Hay demasiados funcionarios en España?

Obtener un puesto fijo, un sueldo “para toda la vida” y una estabilidad laboral entra en los planes de futuro de muchos españoles. Así, conseguir una plaza de funcionario puede suponer una oportunidad profesional más que considerable para intentar escapar de la precariedad del mercado laboral de nuestro país.

En nuestro país hay 3,5 millones de empleados públicos, lo que supone un 17,07% de las 20,54 millones de personas ocupadas del país, según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) correspondiente al tercer trimestre de 2022. Esta cifra no solo incluye a los funcionarios de carrera, sino también al personal laboral al servicio de las Administraciones Públicas- como Fuerzas Armadas o Administración Local- y otros efectivos, tales como altos cargos, personal de empresas públicas y trabajadores de la Administración con contratos de duración inferior o fijos discontinuos.

En este contexto, la temporalidad en el empleo público es una realidad, ya que esta se sitúa en el 30,7%, es decir, 13,2 puntos más que en el sector privado, según los datos de la Encuesta de Población Activa. Esta situación se temporalidad da sobre todo en el País Vasco, ya que el 46,7% de los empleados públicos tienen un contrato temporal, seguido de Asturias y Extremadura, con un 40,1% y un 39,8%, respectivamente, tal y como muestra la radiografía del Empleo Público en España elaborado por la empresa de formación de opositores, Adams Formación.

Más de la mitad de los funcionarios trabaja en las comunidades autónomas

El empleo público en España tiene un carácter descentralizado, ya que la gran mayoría de estos trabajadores, en concreto el 58,9%, prestan sus servicios en las comunidades autónomas. El 20,14% lo hacen en la Administración Local, mientras que solo el 14,96% de los empleados públicos trabajan en organismos de ámbito estatal, tal y como desprenden los datos de la EPA.

Las autonomías con un mayor porcentaje de trabajadores públicos respecto a su población ocupada son Extremadura (26,4%), y Castilla y León (21,1%), aunque a estas les superan con creces las ciudades autónomas de Melilla y Ceuta, con un 48,4% y un 36,3%, respectivamente. En cambio, Cataluña, Baleares y La Rioja son las comunidades que tienen el menor porcentaje de ocupados en el sector público, con un 13%, 13,1% y 14,8%, respectivamente.

En lo que respecta al número de empleados públicos por habitante, la media nacional es de 74 empleados públicos por cada 1.000 habitantes. En el caso de Melilla, Ceuta y Extremadura, estas son las regiones con los porcentajes más altos, con 175, 122 y 105 empleados públicos por cada 1.000 habitantes, respectivamente. Cataluña, Murcia y La Rioja se encuentran en la otra cara de la moneda y por debajo de la media, con 59,5, 61,17 y 67,2 empleados públicos por cada 1.000 habitantes, respectivamente.

Empleo público envejecido

Casi la mitad de los asalariados (44,9%) del sector público tiene más de 50 años, mientras que solo el 7,9% son menores de 30 años. En cambio, en el sector privado, las personas con 50 años o más solo representa el 28,4%, mientras que el 17,9% tiene menos de 30 años. Es por ello que, en apenas cinco años, más de 456.000 funcionarios alcanzarán la edad de jubilación; por lo que en diez años, el número de empleados públicos con más de 65 años superará el millón y en 15 años, 1.573.000 empleados públicos estarán en edad de jubilarse sobre un total de 3.506.200 efectivos.

En lo que respecta al sexo, el 57,1% de los empleados públicos son mujeres, mientras que el 42,9% son hombres. Por tanto, se puede observar una presencia mayoritaria en la Seguridad Social de este sexo, donde 3 de cada 4 empleados públicos son mujeres, y en las autonomías, donde el porcentaje femenino es del 67,66%. En el caso de los hombres, estos son mayoritarios en la Administración Central (68%) debido a que “en las Fuerzas Armadas y los Cuerpos de Seguridad del Estado incluidas en este ámbito, la presencia masculina es muy mayoritaria”, tal y como explica la directora de Empleo Público de Adams, Gloria Oliveros.

El empleo público en Europa

En 2019 el 17,9% de los trabajadores de los países de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) desempeñaban su trabajo en las administraciones públicas, según el informe sobre gobernanza pública de la OCDE.

En el caso de España, este porcentaje era de un 15,6%, más de dos puntos inferior a la media, por debajo de países como Reino Unido (16%), República Checa (16,6%), Grecia (16,7%) o incluso Austria (16,7%); aunque ligeramente por encima de Irlanda (14,9%), Portugal (14,1%) e Italia (13,2%). Los mayores porcentajes de empleados públicos se situaban en los países nórdicos: Noruega (30,7%), Suecia (28,7%) y Dinamarca (27,6%), y cerraban la tabla, Alemania (10,6%) y Suiza (10,2%). Asimismo, el informe señalaba que el empleo público en España había crecido en los últimos dos años un 1,24% respecto al empleo total, el porcentaje más alto que se registra entre los países de la OCDE.