IPC

La precaria tregua del IPC: se modera al 6,8% pero los alimentos siguen disparados un 15,3%

La caída en el precio de carburantes y electricidad modera el índice general. Los precios del azúcar (+50,2%); el aceite (+31,5%), la leche (+30,9%) o los huevos (27,1%) continúan sin control

La inflación anual estimada del IPC en noviembre de 2022 quedó finalmente en el 6,8%, tal y como avanzó en el indicador adelantado que publicó a finales de mes pasado. Con este aumento, cinco décimas inferior al de octubre, se confirma el incremento más moderado de la inflación desde enero y el cuarto mes seguido en que los precios recortan su crecimiento en tasa anual, después de que en agosto bajara tres décimas, hasta el 10,5%; en septiembre disminuyera 1,6 puntos, hasta el 8,9%, y en octubre se redujera 1,6 puntos, hasta el 7,3%. También es el tercer mes consecutivo en que la inflación se coloca por debajo de la cota del 10%.

Esta evolución es debida, principalmente, a la bajada de los precios de los carburantes, que subieron en noviembre de 2021, y de la electricidad, con un descenso mayor que el del año pasado. También influye, aunque en menor medida, el aumento de los precios de la nueva temporada del vestido y calzado, más moderado que en 2021. Sin embargo, en el cómputo global los precios tienen incrementos sustanciales a doble dígito en la cesta de la compra.

Evolución anual del IPC
Evolución anual del IPCTania Nieto

En torno a dos de cada tres puntos del repunte de la inflación en los once primeros meses de este año se debe a los alimentos. En concreto, el IPC acumulado de enero a noviembre es del 5,5%, siendo el grupo de los alimentos responsable de un total de 3,1 puntos. Por tanto, la cesta de la compra sigue disparada, con un incremento anual del 15,3%, solo una décima menos que en octubre. Los alimentos que más han subido de precio en el último año son el azúcar (50,2%); las harinas (37,6%); la mantequilla (37,5%); los aceites y grasas (31,5%); la leche (30,9%); los huevos (27,1%); los cereales (22,9%); los productos lácteos (21,7%) y las patatas (21,5%). Otros productos básicos que acentúan su subida por encima del 10% son el pan (14,9%), legumbres y hortalizas (14,6%), carne de cerdo (13,2%), la de ave (16,6%), pescado (10,9%) o café, cacao e infusiones (10,3%).

Por contra, lo que más se ha abaratado desde noviembre de 2021 son el transporte combinado de pasajeros (-38,7%); la electricidad (-22,4%); el transporte de pasajeros en metro (-18,2%); el transporte de pasajeros en autobús (-12,4%), y los equipos de telefonía móvil (-7,7%). Estos datos reflejan los efectos de los bonos gratuitos al transporte aprobados por el Gobierno y que algunas comunidades autónomas han complementado con rebajas adicionales.

La tasa de variación anual estimada de la inflación subyacente -índice general sin alimentos no elaborados ni productos energéticos- aumenta una décima, hasta el 6,3%. El Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA) situó su tasa interanual en el 6,7%, seis décimas inferior a la registrada en el mes anterior. Por su parte, la variación mensual del IPCA registra un descenso de tres décimas. También destaca el INE que el IPC a impuestos constantes, sin tener en cuenta la rebaja del impuesto especial sobre la electricidad y las variaciones sobre otros impuestos, el IPC interanual alcanzó en noviembre el 7,3%, cinco décimas por encima de la tasa general del 6,8%.

Por comunidades, la tasa anual del IPC disminuye en noviembre respecto a octubre en todas las comunidades autónomas. Los mayores descensos se producen en Illes Balears, Comunidad Foral de Navarra, Aragón y Principado de Asturias, con bajadas de 1,0, 0,8, 0,7 y 0,7 puntos, respectivamente. Por su parte, las menores bajadas se producen en Canarias, de 0,1 puntos, y en Galicia, Extremadura y Castilla y León, con descensos de 0,3 puntos en cada una.

Fuentes del Ministerio de Asuntos Económicos no han mostrado su preocupación por los elevados precios de la cesta de la compra y han puesto en valor la reducción durante los últimos cuatro meses de la inflación en cuatro puntos, lo que “sitúa a España como uno de los países con una disminución más rápida e intensa de la Unión Europea. España mantiene un diferencial favorable en la inflación armonizada de 3,3 puntos, debido a la evolución positiva de los precios energéticos, lo que a su vez favorece la competitividad de las empresas españolas”.