Energía

El fin del descuento de 20 céntimos provoca el desabastecimiento en gasolineras y comunidades de vecinos

Las estaciones de servicio cargan contra el Gobierno por la falta de planificación y su tardanza en anunciar el fin de la bonificación. La colas ante los surtidores se multiplican. Las gasolineras que están teniendo más problemas son las de marca blanca

Decenas de coches forman cola en una gasolinera por el próximo fin del descuento de 20 céntimos del Gobierno en Las Rozas, Madrid
Decenas de coches forman cola en una gasolinera por el próximo fin del descuento de 20 céntimos del Gobierno en Las Rozas, MadridJuan A. LavínAgencia EFE

Las colas de vehículos ante los surtidores de combustible para llenar al máximo el depósito ante el fin del descuento de 20 céntimos ya han provocado el desabastecimiento de algunas estaciones de servicio, que han vaciado sus tanques ante tanta demanda -en algunas estaciones hay un tiempo de espera para repostar de una hora-. Aunque no solo por esta razón. La Confederación Española de Empresarios de Estaciones de Servicio (Ceees) ha denunciado que algunas gasolineras están teniendo problemas para reabastecerse de carburante ante el incremento de demanda que está produciendo los últimos días del año ante el fin del descuento general.

Según ha confirmado esta patronal, se ha producido un gran incremento de la demanda, que estaría ya doblando sus cifras habituales, lo que explicaría que se estén produciendo “cuellos de botella” en la distribución que llevan a cabo los proveedores. El director general de Ceees, Nacho Rabadán, advierte de que las gasolineras que están teniendo más problemas son las de “marca blanca” y las ubicadas en zonas rurales puesto que todas las estaciones están haciendo acopio de combustible y la distribución no tiene capacidad de reposición al mismo ritmo que de venta.

Las gasolineras que pertenecen a grandes grupos cuentan con una distribución más rápida y accesible, porque en muchos casos la cadena es propia, pero en el caso de las independientes que se abastecen en el mercado, los problemas que se han acentuado, especialmente en las zonas rurales, las más alejadas de las rutas.

En este sentido, el mayor problema de suministro se ha situado en el reparto del gasóleo B utilizado para calefacción, que también se beneficia del descuento de 20 céntimos. Tanto las comunidades e vecinos como los domicilios particulares han hecho acopio de reservas antes del día 31 para beneficiarse de la bonificación y ha provocado un tapón importante en la distribución. Por esta razón, Rabadán ha lamentado que a la hora de tomar esta decisión “el Gobierno debería haber hecho las cosas con más cabeza y más planificación porque cuando lo anunció oficialmente ya era muy tarde”.

Además, ha calificado la decisión de retirar esta ayuda es “una medida precipitada” puesto que el sector prevé que el precio de los combustibles sea “todavía muy alto en 2023″. “Se han equivocado en el diagnóstico”, afirmó, antes de concluir que las ayudas directas aprobadas para los transportistas “se han quedado muy cortas”. Esta patronal ya alertó la pasada semana de que la inconcreción mantenida por el Gobierno sobre la bonificación de 20 céntimos condenaba al sector y a la sociedad “al caos, las colas y el desabastecimiento”. Desde Ceees denuncian que el Gobierno no les anticipara nada sobre su decisión de forma previa a la aprobación de la medida con el objetivo de haber preparado con mayor tranquilidad el final del año y la entrada a 2023.

Los principales operadores de carburantes han decidido prorrogar su política de descuentos más allá del próximo domingo. Ninguno quiere quedarse atrás entre sus competidores y han iniciado una guerra de descuentos. El primero en hacerlo fue Repsol, que el mismo día de la aprobación del real decreto anunció que mantendría su descuento adicional de 10 céntimos hasta el próximo 31 de marzo en gasolinas, gasóleos, gas natural vehicular y autogas para los clientes que utilicen su aplicación de pago y fidelización Waylet y ya le han seguido todos. Cepsa mantienesu rebaja extraordinaria en sus carburantes hasta los 12 céntimos por litro, 10 céntimos del descuento que viene aplicando desde abril y dos céntimos adicionales para aquellos que reposten combustibles premium de la gama Óptima.

BP ha confirmado que seguirá aplicando «como hasta ahora» su política de descuentos. Galp ha seguido el mismo camino con una rebaja de 10 céntimos por litro en todos los combustibles para los clientes que tienen la aplicación Mundo Galp y un descuento, que sólo se puede usar una vez, de 25 céntimos por litro para los nuevos usuarios. El grupo DISA, licenciatario de la marca Shell en España, conserva el descuento de hasta 10 céntimos por litro a los usuarios de su aplicación Mi Energía DISA. En su caso, el descuento varía según el tipo de combustible entre 10 y 5 céntimos.

Las gasolineras independientes y los pequeños distribuidores han cuestionado estos descuentos porque defienden que van en contra de la competencia al no tener capacidad para igualar estas campañas. La propia CNMC ha puesto en marcha una investigación por posibles prácticas anticompetitivas tras la denuncia de dos pequeñas operadoras.