Al alza

Los precios de la vivienda crecen casi dos puntos por encima del IPC

Cierran 2022 con un incremento del 7,5%, frente al 5,8% de la inflación. Es su mayor repunte en 17 años

Vista de un edificio en construcción en San Sebastián
Vista de un edificio en construcción en San SebastiánJavier EtxezarretaAgencia EFE

Aunque el foco de la inflación está puesto en el crecimiento de los precios de los alimentos, hay otro sector, el de la vivienda, que también tira ahora al alza del IPC. Según los datos recopilados por el portal inmobiliario Fotocasa, el pasado año el precio de la vivienda cerró con un incremento del 7,5%, casi dos puntos por encima de la inflación, que lo hizo en el 5,7%. El dato de este portal está alineado con el del índice de diciembre de la tasadora Tinsa, que muestra un incremento de los precios del 8,4% en diciembre en tasa interanual y del 8,8% en el último trimestre.

Los precios de la vivienda, que según Fotocasa registraron su mayor incremento en 17 años, subieron en todas las comunidades autónomas, aunque lo hicieron con especial fuerza en Navarra (16,9%), Baleares (13,8%), Canarias (10,9%), Comunidad Valenciana (8,8%) y Madrid (8,3%), según los datos recogidos por este portal inmobiliario. De media, el precio cerró el año en 2.051 euros el metro cuadrado tras superar los 2.000 en septiembre después de haberse situado más de diez años por debajo de esa barrera.

Por zonas, Tinsa ha constatado un incremento de precios según las tasaciones del 10,9% en áreas metropolitanas, del 8,5% en capitales y grandes ciudades y del 7,3% en el resto de municipios.

Más velocidad

El precio de la vivienda se aceleró con rapidez en el segundo semestre del año. Hasta entonces, Fotocasa asegura que los incrementos habían sido moderados, por debajo del 3,5% interanual. Sin embargo, a partir de la primera subida de tipos de interés aprobada en julio por el Banco Central Europeo (BCE) para frenar la inflación, empezó el ascenso. A pesar de que el coste de la financiación bancaria se está endureciendo, «lejos de frenar la demanda por completo, lo que se detecta en el mercado es un aceleramiento por comprar y un aumento del interés de los ciudadanos mayor» para «sortear la subida de tipos y lograr un préstamos hipotecario con un interés lo más relajado posible», según explica Fotocasa en su informe los precios de la vivienda en venta de 2022.

Esto, según el portal, ha propiciado que la demanda se activase con fuerza en el último trimestre, lo que ha impulsado el tensionamiento de los precios desembocando en incrementos del coste de la vivienda superiores al 7%.

«En términos acumulados, el nivel de operaciones en 2022 ha sido elevado y, combinado con una oferta moderada, ha continuado impulsando los precios residenciales al alza», coincide Cristina Arias, directora del servicio de estudios de Tinsa.

Tanto Tinsa como Fotocasa coinciden en apuntar que este vertiginoso crecimiento de precios está próximo a tocar techo si no lo ha tocado ya. La previsión es que el precio de la vivienda vaya ralentizando su crecimiento a medida que el impulso de la demanda vaya moderándose como consecuencia de la incertidumbre económica y el encarecimiento de la financiación, dice la tasadora.

«En 2023, se espera que el precio de la vivienda vuelva a la senda estable, como la que presentaba al comienzo de 2022. A medida que el euribor siga aumentando, el enfriamiento de la demanda cambiará la tendencia y podrá provocar el enfriamiento en determinados mercados, por lo que es probable que asistamos a correcciones de precios durante 2023», advierten desde Fotocasa.

A pesar del importante avance de los precios, la vivienda sigue todavía muy lejos de los valores que registró durante la burbuja inmobiliaria. En concreto, y según Tinsa, un 18,3% por debajo de las cifras que alcanzó en su cenit, en diciembre de 2007. En el caso de las capitales y grandes ciudades, es un 17% inferior mientras que en las islas, un 10,8%. En la costa del mediterráneo, más castigada por el estallido de la burbuja, está todavía un 30,5% por debajo de los máximos que marcó en febrero de 2008.