Abengoa vale «siete veces más si opera que si se liquida»

Abengoa comunicó ayer al mercado las líneas detalladas del plan de viabilidad industrial con el que quiere convencer a sus acreedores financieros y a los bonistas de que cuenta con negocio suficiente para evitar el concurso de acreedores, un escenario que la llevaría a la liquidación y que «supondría enormes pérdidas» para todos. Según detalla la empresa en un comunicado enviado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), las necesidades de liquidez para aplicar la «hoja de ruta» de su proyecto para los próximos dos años ascienden a 1.655 millones de euros, entre préstamos y garantías.

Este documento «conservador» y «realista» supone la «mejor manera de maximizar el valor» de la compañía», según apuntó ayer el representante de la consultora Álvarez&Marsal –la firma que ha asesorado a la empresa energética para la elaboración del plan de viabilidad–, Toni Álvarez, en una conferencia con analistas. El plan cifra en 5.395 millones de euros el valor de la «nueva Abengoa» que salga del preconcurso, es decir, «siete veces más en operación que en liquidación».

El plan dibuja un modelo de negocio capaz de generar unos 1.000 millones de euros de caja entre 2007 y 2020, un impacto positivo derivado de desinversiones de activos no estratégicos de 473 millones en 2016-2017 y la salida de proyectos con altos requerimientos de efectivo, lo que reducirá sus necesidades de caja en 2.095 millones en ese periodo. En cuanto a las necesidades de liquidez, Abengoa las cifra en 826 millones para este año, a los que se sumarían 304 millones para 2017. Junto a esto, suma «garantías técnicas» por valor de 525 millones para poder trabajar.

Por otra parte, la jueza de la Audiencia Nacional Carmen Lamela, que investiga al ex presidente de Abengoa Felipe Benjumea por un posible delito de administración desleal, siguió ayer los pasos del fiscal e impuso medidas cautelares consistentes en la retirada del pasaporte y la obligación de comparecer cada 15 días.