Así es como le pueden dar dinero al realizar una compra

Las tarjetas de crédito y las aplicaciones de banca como Bizum se han posicionado como los principales métodos de pago que los ciudadanos utilizan en su día a día, dejando al dinero en efectivo en un segundo plano. Tanto es así, que en España hay en circulación 88 millones de tarjetas, es decir, casi dos por habitante, dejando a la vista el afán de la utilización de este dinero plástico.

Pese a ello, el metálico sigue resultando imprescindible como instrumento de pago y el cajero automático es el lugar por excelencia donde acudir para obtenerlo. No obstante, estas máquinas han ido desapareciendo poco a poco del territorio español, al igual que las sucursales bancarias, dificultando a muchos ciudadanos la posibilidad de retirar dinero de su cuenta. Ante este escenario complejo, los ciudadanos que quieran disponer de algunos billetes no deberán alarmarse, ya que la opción del "cashback" o "dinero de vuelta" se presenta como una solución más que considerable.

En este sentido, el "cashback" consiste en que aquella persona que quiera sacar dinero en efectivo de su cuenta bancaria pueda hacerlo sin acudir a un cajero automático. El interesado irá comprar a un supermercado, a repostar gasolina o a cualquier establecimiento que cuente con este servicio y, supongamos, que realiza un gasto de 50 euros. En el momento de ir a pagar, este le solicitará 20 euros en efectivo, por lo que el gasto ascenderá a 70 euros, ya que dicho importe se sumará al precio a abonar. "Así, el cliente pagará con su tarjeta bancaria y el dependiente le entregará la cantidad solicitada en efectivo junto al resto de su compra", explican desde el blog de Santander.

Esta opción del "dinero de vuelta" no solo puede servir para paliar esta falta de cajeros automáticos en algunas zonas de nuestro país, sino que también pueden ser una alternativa para aquellas personas que no se sienten cómodas con estas máquinas, ya que "les resultaría más amigable que el efectivo se lo entregara una persona en mano", tal y como explican desde el Banco de España (BdE).

Asimismo, este organismo bancario señala que hacer uso de esta opción no conlleva ningún coste para el cliente y, además, "el comercio logra una pequeña comisión a cambio. A su vez, el banco ofrece un servicio adicional a su clientela complementando el servicio de sus oficinas y cajeros automáticos".