Laboral

Así puedes calcular tu salario neto a partir del salario bruto

La diferencia entre ambos puede ser de menos de un 10%, es decir, unos cientos de euros para los salarios más bajos, o de más del 40%, varios miles de euros, para los más alto

Una calculadora y una escritura de compraventa de una hipoteca
Una calculadora y una escritura de compraventa de una hipotecaEduardo ParraEuropa Press

En la mayoría de los contratos aparece el sueldo bruto, aunque lo que le interesa saber a los empleados es su sueldo neto, es decir, el dinero que llegará a su cuenta después de descontar las retenciones y cotizaciones que se practican en cada nómina. Obviamente, el salario neto es inferior al salario bruto. La diferencia entre ambos puede ser de menos de un 10%, es decir, unos cientos de euros para los salarios más bajos, o de más del 40%, varios miles de euros, para los más altos. Pero, ¿cómo se calcula el salario neto a partir del salario bruto?

Varias entidades cuenta con una calculadora que hace esta tarea mucho más sencilla, como la de BBVA o la de Santander. Para saber su sueldo neto, se tienen en cuenta los siguientes puntos: sueldo bruto anual, tipo de contrato, categoría profesional, número de pagas, movilidad geográfica, comunidad autónoma, edad, situación familiar, si padece algún tipo de discapacidad, si tiene descendientes o ascendientes a cargo y si tiene los hijos en exclusiva a efectos fiscales. Esto proceso no le llevará más de un minuto, pero si quiere conocer el procedimiento por el cuál se obtiene el salario neto a partir del salario bruto, cuánto le toca pagar en el IRPF o simplemente cómo variará su salario y sus retenciones con una subida de sueldo, Bakinter aclara estas dudas.

Pasos para calcular el salario neto

Para calcular el sueldo neto habría que seguir los siguientes pasos:

  • Calcular las retenciones y cotizaciones que le corresponden en función de su perfil (IRPF y Seguridad Social)
  • Restar al salario bruto esas cantidades.
  • Dividir ese importe entre 12 o 14, en función del número de pagas.

Antes, conviene saber que el salario bruto es solo una parte del desembolso total que una empresa realiza por un trabajador. Así, la compañía paga un plus por la Seguridad Social (Contingencias Comunes), desempleo, FOGASA, Formación Profesional, etc., por cada empleado que oscila entre el 31% y el 37% de su salario bruto. A pesar de las pagas extraordinarias, la Seguridad Social se paga 12 veces al año.

Retenciones de IRPF

La diferencia entre el salario bruto y el salario neto puede ser de menos de un 10% (o unos cientos de euros) para los salarios más bajos o de más del 40% (muchos miles de euros) para los más altos. El primer factor que hay que tener en cuenta para pasar de salario bruto a salario neto son las retenciones de Impuesto de la Renta sobre las Personas Físicas (IRPF). Este tributo es progresivo, esto quiere decir que los ingresos anuales se dividen por tramos y a estos se les asigna un porcentaje de impuestos a pagar sobre la base imponible, que no sobre el salario. Estos son los tramos para 2024:

1º Con ingresos hasta 12.450 euros, la retención es del 19%.

2º Entre 12.450 euros hasta 20.199 euros, se retiene el 24%.

3º Entre 20.200 euros y 35.199 euros, pagará el 30% de IRPF.

4º De 35.200 euros a 59.999 euros, se retiene el 37%.

5º De 60.000 a 299.999 euros, la retención es del 45%.

6º A partir de 300.000 euros, la retención es del 47%.

No obstante, tras la subida del SMI a 1.134 euros mensuales en 2024, los salarios hasta 15.876 euros están exentos de pagar IRPF. A partir de las retribuciones totales (dinerarias y en especie) y quitando gasto deducible de la Seguridad Social, el sistema de la AEAT calcula la base para calcular el tipo de retención.

Seguridad Social

Además de las retenciones, a nuestro salario bruto se les descuenta las cotizaciones a la Seguridad Social. El porcentaje a cargo del empleado es el 6,47% de nuestra Base de Cotización por contingencias comunes, formación, desempleo. Las aportaciones están topadas, así que con la subida de las bases máximas de cotización del 5% en 2024 hasta los 4.720,5 euros mensuales, esta afectará a los salarios brutos a partir de los 56.700 euros anuales –algunos expertos estiman en torno a los 60.000 euros–.

Ejemplo práctico

Un trabajador con un salario bruto de 30.000 euros anuales acabaría con un salario neto 23.133 euros euros anuales que, dividido por 12 pagas, da una nómina efectiva, la que nos llevamos al bolsillo, de 1.927,75 euros mensuales. La retención por IRPF que se le debe hacer a un trabajador en esas condiciones es del 16,42%.

Adicionalmente el salario también se ve afectado por el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), que se aprobó en 2021 con el objetivo de garantizar la sostenibilidad de las pensiones, y ha subido en 2024. Este año, el MEI supone una cotización adicional del 0,7% sobre el salario bruto, de este porcentaje, 0,58 puntos corresponden a la empresa y 0,12 a los trabajadores.