Bankia no varía el dividendo pese a los costes por BMN

Gana 816 millones tras absorber 312 de millones por la integración. Cree que hay «apetito» para privatizar más paquetes grandes.

José Sevilla, consejero delegado de Bankia, aseguró ayer, en la presentación de los resultados de la entidad correspondientes a 2017, que «el mercado tiene apetito para absorber porcentajes mayores de capital». A mediados de diciembre, el FROB puso a la venta el 7% del capital por 1.300 millones de euros, en una colocación acelerada entre inversores institucionales, en la que la demanda multiplicó por 2,3 veces la oferta. Sevilla cree que hay otras fórmulas para poder vender paquetes de acciones mayores en los mercados institucionales. Hasta la fecha, el FROB ha colocado en dos operaciones (2014 y 2017) un 14,5% de su participación. A día de hoy mantiene un 60,6% del capital. Sin embargo, no ve factible, con carácter inminente, una privatización parcial para inversores minoristas. El consejero delegado de Bankia cree que hasta finales de 2019 (la fecha que el Gobierno español ha marcado para la privatización total de Bankia) hay tiempo suficiente para poner en venta diferentes paquetes de acciones.

Beneficio

Bankia logró un beneficio de 816 millones de euros en 2017, lo que supone una subida del 1,4% respecto al ejercicio anterior. Una vez incorporado BMN (consolidó en los resultados el ultimo mes) y contabilizados los ajustes por la fusión, que ascienden a 312 millones, el beneficio se reduce a 505 millones, un 37,3% menos que en 2016. Bankia, en virtud de sus niveles de solvencia, mantendrá el dividendo en 11,024 céntimos por acción, lo que elevará la retribución anual a los accionistas a 340 millones y el «pay out», la parte del beneficio que se destina a retribuir al capital, en el 41,7%.

Bankia se consolida así como la cuarta mayor entidad financiera española, «en un ejercicio el que hemos incrementado en 158.000 personas la base de clientes, hemos captado 2.000 millones en fondos de inversión y hemos multiplicado por 2,3 la concesión de hipotecas», dijo Sevilla.

La estrategia comercial de no cobrar comisiones a los clientes con más vinculación permitió sumar 107.000 personas con ingresos domiciliados. Según adelantó Sevilla, cuando finalice la integración de las plataformas tecnológicas de Bankia y BMN, en marzo próximo, todos los clientes de este grupo de cajas de ahorros se podrán beneficiar de las mismas condiciones.

Bankia cierra 2017 con unos activos de 213.932 (179.098 sin contar BMN), una cartera de préstamos y créditos por importe de 128.782 millones, unos recursos gestionados de clientes de 150.181 millones (sin fondos de inversión) y un capital de máxima calidad del 12,33%. La mayor parte de la cuenta de resultados está relacionada con la contención de los costes, toda vez que el margen de intereses (la diferencia entre los intereses que la entidad cobra por los créditos que concede y los que paga por los depósitos de los clientes) cayó un 9,6% y los ingresos (margen bruto), un 4,4%. Por el lado de los gastos, las provisiones se redujeron en un 9,4%.

Bankia da por cerrado el proceso de reestructuración y se prepara para presentar el nuevo plan estratégico 2018-2020, que cuidará «la política de dividendo a los accionistas con el fin de tratar de devolver las ayudas recibidas del Estado», como señaló Sevilla.

Sevilla discrepó de las palabras de Rato sobre si las ayudas pedidas en 2012 eran exagerada. «No se rescataron entidades. Se buscó evitar las pérdidas de los depositantes en el caso de que hubiera habido una quiebra». Sobre la fusión con BMN, cree que ha llegado en un buen momento por la solvencia, la calidad de los activos y la situación de la economía, aunque «siempre es un sacrificio a corto plazo». Cree que el nivel de concentración de la banca en España es alto y que habrá que esperar para ver integraciones en el marco de la UE.