El BCE baja los tipos de interés hasta el 2%

El Banco Central Europeo (BCE) ha seguido el guion previsto y ha decidido bajar los tipos de interés un cuarto de punto, lo que deja el precio del dinero en el 2%. Esto supone el octavo recorte de tipos de interés en este ciclo, aunque ahora la duda es si la entidad monetaria acometerá nuevas bajadas en los próximos meses o preferirá decantarse por una pausa en el mes de julio. Es más, avisa de que se está llegando «al fin de este ciclo que se abrió tras la guerra de Ucrania, el covid y la crisis de suministros».

Pese a ello, la presidenta de la entidad monetaria, Christine Lagarde, no quiso mojarse sobre nuevos movimientos y se limitó a asegurar que el Eurobanco basará sus movimientos en la información de la que disponga en cada momento y que las decisiones llegarán «reunión a reunión». En todo caso, Lagarde ha dejado entrever que un receso no resulta descabellado. «Ahora con este recorte estamos en una posición muy buena desde la que navegar en la incertidumbre actual».

La entidad monetaria presentó ayer una nuevas previsiones económicas en las que rebaja los datos de inflación de manera considerable y mantiene casi invariables los de crecimiento. En cuanto a los precios, en el mes de marzo se esperaba un incremento de la inflación del 2,3% para 2025, pero esta cifra se reduciría hasta el 2%, en línea con el objetivo de la entidad monetaria. Para el año que viene pasaría del 1,9% al 1,6%. Para 2027 no hay cambios, y se mantiene invariable en el 2%.

Respecto al PIB, para 2025 se mantiene en el 0,9% –la cifra que ya se esperaba en los anteriores vaticinios–. La estimación de 2026 es la única que cambia, con un recorte de una décima, y pasa del 1,2% hasta el 1,1%. De cara a 2027 el organismo espera un crecimiento del 1,3%.

Antes de la reunión, algunos analistas vaticinaban que la entidad monetaria puede decantarse por un descanso en los próximos meses y esperar a comprobar cómo se desarrolla la guerra arancelaria de Donald Trump, que ha sumido la economía global en la incertidumbre.

Sobre cómo pueden afectar los aranceles de Estados Unidos en los meses venideros, Lagarde explicó que, de momento, no se han sentido las consecuencias, ya que «los pedidos al sector manufacturero se han adelantado en previsión a los gravámenes». Sin embargo, los economistas del BCE también advierten de «un sector servicios desacelerándose, los mismos aranceles y un euro fuerte dificulten la actividad de las empresas». A pesar de esto, Lagarde también ha puntualizado que hay varios factores que mantienen la economía fuerte. Entre ellos, mercado laboral, las condiciones financieras (por los recortes de tipos) y los beneficios. empresariales.

La presidenta de la entidad financiera también señaló que «las medidas anunciadas recientemente para incrementar la inversión en defensa e infraestructuras también deberían impulsar el crecimiento». A pesar de esto, avisa de que este incremento de las inversiones «puede también disparar los precios». Además también deben cuantificarse los problemas en la cadena de suministro debido a la guerra comercial. La entidad financiera promete nuevas actualizaciones ante un escenario tan incierto.