BCE

El BCE prevé una bajada de la inflación en 2024, pero no anticipa cuándo bajarán los tipos de interés

La presidenta del organismo insiste en que los posibles cambios en los tipos se harán en función de los datos que vayan recibiendo

Christine Lagarde, presidenta del Banco Central Europeo
Christine Lagarde, presidenta del Banco Central EuropeoDPA vía Europa PressDPA vía Europa Press

El Banco Central Europeo (BCE) espera que la inflación continúe moderándose este año, aunque las decisiones tomadas en cuanto a modificaciones en los tipos de interés se harán en función de los datos con los que se cuente. Así lo ha transmitido este jueves la presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, durante su último debate sobre política monetaria con la comisión de Asuntos Económicos del Parlamento Europeo.

Un debate realizado antes de las elecciones europeas que se celebrarán el próximo mes de junio y en el que Lagarde confirmó el proceso descendente de la inflación, en base a los últimos datos. Se espera además que descienda de un modo más gradual en 2024. Sin embargo, no quiso anticipar cuándo podrían bajar los tipos de interés, mostrándose cauta al insistir que requieren de más datos para poder confirmar que la inflación llegará al objetivo marcado. Según explicó, "confiamos en que direccionalmente nos estamos dirigiendo al 2% a medio plazo a tiempo, pero [...] tenemos que tener más seguridad y no tenemos la suficiente todavía en este momento para estar seguros de que es sostenible".

Asimismo, ante las preguntas de los eurodiputados, Lagarde también aclaró que no quieren que se revierta el riesgo, puesto que supondría desperdiciar todo el trabajo realizado e implicaría tener que tomar más medidas. Según explicó en su discurso, factores como la disipación del impacto de las crisis pasadas, las cuales fomentaron el crecimientos de los precios, y las condiciones financieras más severas contribuirán en ese empuje para hacer descender la inflación este año.

En lo referente al mes de enero de este 2024, se produjo una caída del 2,8% en la tasa anual de inflación en la eurozona. Un descenso que se produjo después de haber registrado el mes anterior un repunte de medio punto. Asimismo, la inflación subyacente (la cual excluye energía y alimentos) bajó al 3,3%, en ambos casos una décima menos que el mes anterior.

"Se espera que el actual proceso de desinflación continúe, pero el consejo de Gobierno necesita estar seguro de que nos llevará sosteniblemente a nuestro objetivo del 2%", dijo Lagarde, que afirmó que seguirán trabajando en base a los datos para determinar el nivel apropiado y la duración de la restricción, "teniendo en cuenta la perspectiva de inflación, las dinámicas de la inflación subyacente y la fortaleza de la trasmisión de la política monetaria". Una posición que va en línea con el mensaje transmitido ya en la última reunión del consejo de Gobierno en enero. De hecho, durante dicho encuentro, el BCE tomó la decisión de mantener el tipo de interés rector en el 4,5%, así como la facilidad de crédito (la que presta a los bancos a un día) en el 4,75% y la facilidad de depósito (que remunera el exceso de reservas a un día) en el 4%.

En este sentido, Lagarde ha defendido este jueves ante los eurodiputados que los tipos se sitúan en niveles que, "mantenidos por el tiempo suficiente harán una contribución sustancial para asegurar que la inflación vuelve al objetivo del 2% a medio plazo de manera oportuna".

Los salarios empujan al alza

Sobre los factores que influirán en la evolución de precios en los próximos meses, la presidenta del BCE trasladó que el incremento de los salarios está previsto que "se convierta en un impulso cada vez más importante de la dinámica de inflación en los próximos trimestres". De este modo, ha dicho que el monitor de salarios del BCE "continúa señalando fuertes presiones de los salarios, pero los acuerdos indican una estabilización en el último trimestre de 2023". Además, el impacto de los mismos a lo largo de este año dependerá del resultado de las negociaciones colectivas especialmente, tal y como ha asegurado la presidenta del BCE. Aunque, también remarca que dichas subidas salariales se encuentran "parcialmente amortiguados por los márgenes de beneficios" de las empresas.

Asimismo, a pesar de que la inflación subyacente ha experimentado una caída de forma gradual, tal y como ha explicado Lagarde, la de los servicios "muestra signos de persistencia". En cuanto a la situación macroeconómica, la máxima representante del BCE ha subrayado que la debilidad que presenta la actividad influye en amplios sectores. Además, según ha añadido, los datos parecen indicar que seguirá así "en el futuro próximo", aunque otros destacan, por el contrario, un repunte durante 2024.